1. De vacaciones con mi hermanita


    Fecha: 02/03/2019, Categorías: Incesto Autor: FinoManu, Fuente: SexoSinTabues

    En unas vacaciones familiares. Me encontré con mi hermanita menor y sin darme cuenta terminamos involucrados en una historia un tanto enfermiza. Soy un hombre de 34 años, soltero, condición que muchos amigos y amigas cuestionan diciéndome que es por capricho o por falta de seriedad, en verdad no soy muy aficionado a tener compromisos por eso vivo así y a mi edad me he resignado a continuar en las mismas. De vez en cuando, se topa uno con situaciones que te permiten tener una aventura y no hay porque desperdiciar la oportunidad. Esto que les voy a contar es algo que me ocurrió hace tiempo atrás. Tengo dos hermanos, uno mayor y mi hermanita menor que recién cumple los 18. Ella es una ternura, una morena, alta y atlética por su afición al tenis. Su cabello largo, sedoso y negro que llega hasta sus caderas le da un aspecto sensual y atractivo que se acentúa mas por sus descomunales nalgas y caderas anchas. Sus labios carnosos y sus ojos color miel la hacen ver con una cara de inocencia, sin dejar de lado su sensualidad. Ella es la protagonista de este relato. La familia se reúne muy poco porque por las diversas ocupaciones, cada quien anda en lo suyo, como se dice, y hay poco tiempo, pero cuando nos reunimos tratamos de compartir. A veces logramos rencontrarnos todos, otras veces no. En esta oportunidad habíamos cuadrado un paseo a una finca de unos primos. Se dio el viaje según lo planeado, y yo, el más ocupado, término llegando 1 día después. Al llegar, me recibe mi hermanita, ...
    ... que con un jean muy ajustado que deja ver muy bien sus curvas se lanza sobre mi rodeándome con sus brazos y piernas, la cargue desde el corredor hasta la casa, aprovechando la oportunidad para tocar sus tersas piernas y sus nalgas duras lo cual no la disgusto porque no hizo ningún gesto de desaprobación. Eran más o menos las 3 y el silencio del campo brindaba un ambiente tranquilo. Me desplazo hasta el corredor donde me siento a ver el paisaje, mi hermanita no tarda en llegar. -Hola. Como estas. Dice - Yo bien ¿y tú? - Bien. Sabes. Te extrañamos en el cumpleaños de Marcos. - No pude ir. - ¿Trabajo? ¿Mujeres? - Trabajo beba, trabajo. - Te ves estresado. Necesitas un masaje relajante. Al decir lo del masaje no pude evitar imaginarla en ese trabajo, con sus manos suaves. Aunque sea extraño, ella me generaba una extraña atracción desde los 15 años, no sé si por su cuerpo o su forma de ser, pero me atraía y me costaba disimularlo. Siempre la miraba cuando estaba limpiando la sala o algo, la buceaba en todo su esplendor porque solía andar semi desnuda en la casa, con un short muy corto o una falda que dejaba ver sus pantaletas. Después de una larga conversación me pregunta si tengo novia a lo que respondo que no y ella me confiesa que estaba saliendo con un chico pero por sus malos tratos lo había dejado, después de muchos rodeos me confeso que había practicado sexo oral obligada por ese chico y que esto la había dejado un poco traumada, decía que los hombres la buscaban solo por ...
«123»