1. Me folle a mi hermanito


    Fecha: 17/07/2019, Categorías: Incesto Tus Relatos Autor: Erostros45, Fuente: RelatosEroticos-Gratis

    ... quede quieto observando ese culo redondo, estaba justo frente a mi, lo que tanto necesitaba pero no me atreví a hacer nada, me quede por un largo rato solo mirando y pensando, el corazón me latía muy fuerte, tenía una erección que con palpitaciones sentía que me gritaba para que lo tocara. 
    Nunca fue de mi agrado pero admito que era un niño muy lindo, de pelo negro bien liso y corto, de ojos azules como su padre (que era lo único bueno de ese viejo amargado) también tenía una cinturita tan supremamente sensual, flaquito con bonitas piernas que lucía siempre, parecía como si ese ultimo dato lo supiera muy bien ya que le gustaba andar con shortsitos cortos o en boxer por la casa.
    Pensé en que hacer, de pronto me di cuenta de una cosa, estábamos, nadie se daría cuenta si lo toco un poco, era una oportunidad perfecto presentándose ante mi, como si me lo sirvieran en bandeja de plata. Lo hice, le acaricie las piernas y esas nalgas, las toque como si fueran masas de pan pero despacio, con cuidado para que no se despertara. Luego quise ver esas hermosas nalgas así que le baje el boxer con lentitud. Ya estaba al descubierto, blancas y redondas, sentí un palpitar en la cabeza de mi pene, me dieron ganas de besarselo y morderselos pero sobretodo de meterle toda mi verga. 
    Saque mi pene y me lo acaricie lentamente, tocaba la punta de mi pene le quitaba un poco del liquido preseminal que me salía a chorros y se lo ponía en su rayita. Después quise restregar mi pene en ese bello culito ...
    ... así que me quité mis pantalones y subí a la cama lentamente para no moverla mucho y despertarlo o provocar que se mueva de esa posición perfecta. Me acerque lo suficiente y puse mi mojado pene en la rayita de ese culito de niño y lo moví varias veces pasándolo de arriba a abajo de su culo. Me excite tanto con eso que sin querer hice una embestida como si la estuviera metiendo y me salió un gemido que lo despertó.
    --Cesar? Que estás haciendo? --me preguntó, me quede quieto sin poder hablar. El aún se mostraba entredormido y miró mi pene incrustado en su sulo pero no dijo nada, no se apartó ni me gritó, solo me miró esperando una respuesta.
    --Nada, solo me acuesto contigo-- le dije mientras me recostaba junto a el quedando en cucharita, envolví mi brazo a su cintura y le di un beso en el cachete que lo tenía tan redondo como sus nalgas. Me miró a los ojos y me sonrió, yo tome su mano y la dirigí a mi pene, hice que lo agarrara y lo masturbara.
    --Te gusta? --le pregunté
    --A ti te gusta? --me responde con otra pregunta
    --Claro que si-- respondí con gesto confuso
    --Bueno-- dijo el.
    Yo me confundí, no sabía si pensaba que estaba soñando, si era tonto o que pero no se estaba quejando. Ademas por su cara se notaba que le gustaba, supongo que le daba vergüenza reconocerlo o no se...
    El caso es que por primera vez se mostró muy obediente y hacía todo lo que le decía, se puso boca abajo, le dije que le metería mis dedos, solo asintió. Me resultó increíble esa repentina actitud, ...