1. Nuevas Experiencias 1


    Fecha: 23/05/2020, Categorías: Infidelidad Tus Relatos Autor: Lola Barnon, Fuente: RelatosEroticos-Gratis

    ... esfuerzo, tesón y agallas. 
    Sí, se podía decir que, gracias a ese sacrificio, éramos terratenientes, pero eso, al contrario que los pisos en Madrid, tenía y tiene, un valor bastante menor. Nosotros vendíamos olivas, aceite, algodón y últimamente, turismo rural. 
    Y debo admitir que, gracias a la labor de mi padre y de mi hermano, ingeniero agrónomo, las ventas iban en ascenso, en concreto las del aceite gourmet, gracias a una pequeña almazara y un buen planteamiento comercial.
    Mi padre ya está muy mayor; es de esos jubilados que no saben serlo y continúan y continuarán yendo a trabajar o a ver trabajar. Ya no entraba en los detalles, pero era gratificante verle en bastante buenas condiciones aún, acudiendo al cortijo y distrayéndose con aquello. Ahora es mi hermano quien se encarga de todo, y es un excelente profesional. Mi madre, falleció hace tres años y medio. Fue muy triste para todos, incluida Isabel, que me consta que la apreciaba. 
    Con esto, lo que quiero decir es que nuestra vida era casi envidiable. Se podría decir que el noventa por ciento de los mortales, se cambiarían por nosotros sin dudarlo. Por eso, no entendí —y a pesar de todo sigo sin hacerlo— aquellas palabras de Isabel…
    
    
    
    
    
    
    
    Capítulo 2
    
    
    1
    
    Habíamos vuelto hacía apenas unos días de las vacaciones de Semana Santa. Era principios de abril, y por fin, empezaba a hacer algo de sol. 
    Los niños estaban dormidos; eran las once y media de la noche de ese martes, y Isabel y yo acabábamos de ...
    ... hacer el amor. Como casi siempre, razonablemente bien. Al menos para mí. No me consideraba un mojigato, ni alguien sin experiencia, pero tampoco un semental. Isabel y yo empezamos a salir en su segundo de carrera y mi tercer año. Nuestra trayectoria había sido la de unos jóvenes normales. Yo, un par de novias más o menos de cierta duración y seis o siete ligues que terminaron en la cama. Ella, un novio que pudo ser serio, y dos o tres chicos más. Ni podíamos presumir de mucho, ni tampoco considerarnos unos extraños de la materia. 
    No habíamos tenido conversaciones sobre figuraciones sexuales. Quizá porque esos primeros años de novios y de matrimonio fueron suficientemente activos como para construirnos nuestra propia realidad sexual, sin recurrir a fantasías o anhelos incumplidos. 
    A pesar del poco tiempo disponible, como antes he dicho, lo aprovechábamos bastante bien. Follábamos todo lo que podíamos y nos atrevimos con casi todo. Incluido el sexo anal, probándolo por primera vez, una noche que regresábamos de cenar los dos bastante achispados y contentos por la bebida. 
    Nunca había pensado, y lo digo de verdad, que algo estuviera minando nuestra relación. Sí, ahora con más detenimiento, y con el paso de los días y las experiencias, es posible que no detectara las señales que ahí estaban. Tampoco las hablamos nunca. Y eso, unido a la cotidianeidad de nuestras vidas, nunca me hizo sospechar lo más mínimo.
    Como digo, habíamos terminado de hacer el amor. Ya no era como de ...
«12...456...12»