1. Me tiré a mi amiga culona


    Fecha: 16/12/2017, Categorías: Hetero Autor: Aldebaran, Fuente: CuentoRelatos

    ... estuvo mirando un rato. Tras escoger tres, se fue a los probadores. Cuál no sería mi sorpresa, cuando me dijo que la acompañara dentro. -Oye no puedo, le dije, eso es muy íntimo. Te quitarás los pantalones y eso. -Sí, pero contigo me siento bien. Eres buena persona. Entramos los dos y ella echó el pestillo. Se quitó el pantalón y se quedó en bragas, claro. Yo evitaba mirarla. -Mírame, por favor. Lo he pasado mal con los hombres y ahora quiero recuperar la confianza en ellos. Te he escogido a ti. Eres el mejor hombre que he conocido. Me sentí mal de nuevo porque aquella vez en la ducha... -No seas tímido. Mírame por favor. Se giró y se puso de espaldas a mi, con lo que tenía su culo a la vista. La verdad, viéndolo así, no me parecía tan mal. Evidentemente tenía celulitis y era muy grande, pero a fin de cuentas era un culo de mujer. Y las mujeres son lo que más me gustan. -¿Qué te parece? Me preguntó. -Me parece estupendo, contesté. -Gracias. Era muy importante para mi. Tras elegir un par de vaqueros, salimos de la tienda y fuimos a tomar algo a una cafetería del centro comercial. No sabía que ya lo tenía preparado. Al salir de la cafetería me invitó a su casa. Me dijo: -Te voy a ser clara. Me gustas y eres el primer hombre que me ha tratado bien en mucho tiempo. Así que quiero agradecértelo y quiero hacer el amor contigo. -Pero... -No digas nada. Solo vamos a casa. -No tengo... me corté. Condones. -Es verdad, yo tampoco. Compremos entonces. Entramos en una farmacia y ...
    ... pedimos condones. Me sentí un poco cortado cuando la dependienta nos preguntó de qué tipo los queríamos. -Los más finos que tenga. Le dijo Liliana. -¿De seis o de doce unidades? -De seis, por favor. Pagamos y salimos. Llegamos a su casa y tras dejar la bolsa con los vaqueros en el sofá, ella me llevó directamente al dormitorio. -Supongo que tú tienes más experiencia que yo en el sexo. Así que, por favor. ¿Podrías llevar tú la iniciativa? -Claro, le dije. Pese a que me sentía nervioso, no me importaba. Nos besamos suavemente y luego le pedí permiso para meterle la lengua en la boca. Ella aceptó. Luego la desnudé y yo me desnudé también. Para entonces ella estaba ya muy excitada. Sus pezones estaban duros como rocas y yo se los chupé. Mi pene estaba duro también y ella lo acarició. Yo no quería que me la chupase esa primera vez. Solo quería que todo fuera muy romántico. La masturbé un poco y enseguida noté su humedad. Me cogió entonces de la mano y me llevó a la cama. Ella se tumbó boca arriba y me pidió que le hiciera el amor. Yo estaba muy excitado y no podía detenerme. Cogí un preservativo y me lo puse. Entonces me dispuse a penetrarla. Me di cuenta que, debido a sus muslos grandes, tendría que separarlos mucho, y no sabía si podría penetrarla fácilmente. Tras separarlos, procedía a penetrarla. La introduje, pero solo entraba mi glande. Ella miró a mi pene y ayudó separando sus labios y abriendo sus muslos un poco más. Entonces entró del todo. -Uf, gimió. Házmelo suavemente. Me ...