1. Mi primo II


    Fecha: 06/04/2024, Categorías: Incesto Autor: paqui, Fuente: RelatosEróticos

    ... vida y como dije antes, no se podía poner dura del todo porque no se sujetaba del peso que tenía y la longitud.
    
    A mi aquella serpiente me estaba turbando la mente, y solo pensaba en la manera de poder tocarla, por hacerle caso a mi primo y por mi misma, así que le pregunté que si podía tocarla y me dijo que si, pero que solo eso (se ve que había cogido miedo a hacerlo con una chica), le dije que no se preocupara que sería solo tocarlo, así que acerque mi mano a su cosa y no podía abarcarla tuve que usar la dos y le pregunté que si le apetecía que las moviera a lo que accedió. Era muy distinta a todas las que había tocado antes, ni era como la de mi primo, ni como la del caballo, … era totalmente distinta, pero me ponía muy cachonda por el tamaño y por la cara que ponía el pobre hombre, se ve que no lo habían tocado nunca y se estremecía con mi masaje y quise darle algo más así que me la llevé a la boca, siendo imposible meterla (tengo la boca pequeña además) así que me limité a darle lametones a ese gigantesco capullo. Era increíble ver a un hombre grande como él y con aquello que apenas se podía sostener en pie, ya que le estaba gustando mucho según decía y para dejarle un buen recuerdo, le pedí que se sentara en el sillón y me puse de rodillas delante de él y desabrochando la parte de arriba ...
    ... de mi vestido saqué mis pechos y le dije que los tocara un poco si quería, cosa que hizo y se excitó mucho más aun y sobre todo cuando se la coloqué entre ellos y empecé a moverlos, no aguantó mucho y en una de las veces que le di con la lengua, empezó a echar chorros de leche que me recordaron al caballo, para quedar desfallecido al instante.
    
    El pobre no sabía después como darme las gracias, decía que lo había hecho inmensamente feliz y que había vuelto a sentirse hombre. Tan respetuoso era que cuando le dije que aquello no volvería a suceder, me dijo que lo entendía, y que solo tenia palabra de agradecimiento hacías mí.
    
    No sé si lo pensáis o no, pero aquello se repitió mas veces a lo largo del verano, jiji.
    
    Cuando salí de su casa, estaba mi primo esperándome, ya que el muy capullo había estado espiándonos como era su costumbre y me llevó directamente al pajar, donde me echó un polvo riquísimo, ya que estábamos los dos muy cachondos y diciéndome que era muy puta mientras me follaba, que cada vez lo era más y que era totalmente suya.
    
    Para no alargarme más, en el próximo relato, os contaré mi vida de estudiante en Granada, bueno antes de eso os diré que ese verano fui elegida reina de la fiestas del pueblo y así fue como conocí al que hoy es mi marido. Pero eso es otra historia.
    
    Besos. 
«1234»