Julissa La Sirvienta y Su Hija Evelyn - Relatos Eróticos

Julissa La Sirvienta y Su Hija Evelyn

... fue increíble otra vez su orgasmo, la cual dejo de chupar mi pene y gritaba como loca.

Julissa- Santo cielo, nunca había sentido estas ganas de coger, AAAAHHHH, AAAAHHHHH, AAAAHHHH, ASÍ, ASÍ COMETE MI PUCHA, COMETELA, ME VENGO OTRA VEZ, AAAAAAAAHHHHHHHHHH.

Recibí en mi cara sus jugos y que decir de su chorreante venida me calentó más, en eso de desplomo junto a mi verga, sus piernas temblaban, pude notar como los labios de su vagina se contraían como si fueran los labios de una boca queriendo dar un beso, lo cual aproveche con los labios de mi boca los aprisione dando una buena chupada ella nuevamente tuvo un orgasmo.

Julissa- AAAAHHHH, que rico, otra vez me vengo.

Otra vez recibí sus jugos.

Luego de eso cambiamos de posición, me subí sobre ella y mi verga que ya estaba totalmente empalada entró en su vagina lubricada, abriéndola más, sus labios de su vagina se opusieron pero el tamaño de mi pene fue brutal cedieron dejando pasar el grosor de mi miembro, comencé a cogerla solo con la mitad de mi pene entrando y saliendo de su vagina, en eso con el peso de mi cuerpo ayudo a meter todo mi pene en ella me abrazó y nuestros cuerpos quedaron pegados el uno al otro, solo mi cintura y pelvis se movían rítmicamente penetrándola sin cesar, sus pechos se movían con las embestidas que le daba, ella no tardó en llegar a otra corrida, jadeando y decir que se venía, comprendí que era una mujer muy caliente en la cama, de esas mujeres que les puedes sacar varios orgasmos en ...

... una sesión.

Julissa- AAAAGGGGGGGG, AAAAAHHHH, AAAAHHHHH, ME VENGO, ME VENGO OTRA VEZ.

Sentí como sus paredes de su vagina se tensaron aprisionando mi pene fue delicioso, ya lo había sentido con Alma, pero coger con Julissa era diferente.

Luego la puse en la posición de perrito, quería verle ese bello culo que me traía bien loco cuando usaba leggins, desnudo con esos cachetotes era pomposo, rígido y suaves, la penetré tomándola de las nalgas, se las tocaba, las apretaba y en ocasiones la nalgueaba, ella retozaba de gusto. Le penetré el culo con mi dedo pulgar mientras la cogía, ella pegaba de gemidos y de ese modo llegó a su siguiente orgasmo gritaba que mi pene la llenaba y que nunca había sentido una cogida como le estaba dando, me pedía que le diera más fuerte, la follé más duro, pero con eso ambos tuvimos nuestra venida, deposité un buen chorro de esperma en su vagina, yo casi grito de placer cuando me estaba corriendo.

Julissa- TIENES UNA BUENA VERGA, ME LLENA, NUNCA HABIA SENTIDO UNA COGIDA COMO ESTA, QUE RICO SIENTO, DAME, DAME MÁS DURO, NO PARES, NO PARES, SIGUE, SIGUE, AAAAHHHH, AAAAHHHHH, AAAAHHHHH, ME VENGO, ME VENGO, SIENTO TU LECHE COMO CORRE EN MI PUCHA, SABROSO, QUE RICO.

Yo-AAAAAAHHHH, ERES UNA MUJER INCREIBLE JULISSA.

Pude haber darle otra cogida, pero recibí una llamada de Alma que fuera atraerla de un antro, que no se sentía bien, nos besamos y nos despedimos le dije que esto continuara si ella quería, ella tenía cierto arrepentimiento por ...