Patas arriba (XXIII)
Fecha: 23/10/2018,
Categorías:
Gays
Grandes Series,
Autor: Anderson, Fuente: CuentoRelatos
... historia de Migue y Santi, y sé que Anderson escribe la de ustedes, así que ya sabéis. La verdad, nos hizo mucha gracia la ocurrencia y nos reímos un buen rato, luego Lev nos llevó a unos sitios en primera fila, vamos, teníamos todo el teatro para escoger, así que realmente fue como la tercera fila, donde estás lejos para disfrutar todo el escenario, pero no tan cerca como para sentir que te cae el telón encima. Pensé que Lev quería que nos sentáramos para contemplar todo el esplendor del lugar, pero creo que es mi despiste, porque los demás se veían muy interesados en el escenario y cuando miré a mi Cami, él sólo me dio un pico. - ¿Sabes qué está pasando? - Claro que sí, es obvio, ¿no? –mi cara de desconcierto debía decirlo todo porque Cami me dio otro pico y me explicó-: es una función privada sólo para nosotros, tuvieron el detalle de mandar a todo el público a casa para que lo disfrutemos al máximo. - Jopé –fue todo lo que pude decir porque justo en ese momento se levantó el telón. Primero salió Santi, hizo una pequeña presentación en nombre de la compañía de lo que íbamos a ver, así como presentar a los músicos. Luego Migue y Lev hicieron su actuación y debo decir que nunca he escuchado algo mejor, por la calidad, por la pasión de la ejecución, el profesionalismo y, por supuesto, por la amistad y la química que unen a pianista y cantante, eso siempre le da a la ejecución un punto que ni el mejor profesional puede darle, y estos dos se nota que son los mejores amigos ...
... del mundo. Todos estábamos embobados con la presentación y ni nos enteramos que Anderson y su amigo se habían acomodado junto a Santi en las butacas de atrás y disfrutaban el espectáculo, no sólo de la presentación, también nosotros, que parecía la primera vez que escuchábamos música en la vida. Lo disfrutamos como nunca, vamos, no somos buenos en idiomas y Lev cantaba en alemán, que ninguno de nosotros conoce ni de lejos. Después de la presentación, que creo que nunca olvidaré el dolor de manos que pillé de tanto aplaudir, Santi nos llevó a la zona de camerinos, que no se quedaban atrás en cuanto a esplendor y magnificencia, al menos para mí, y allí estuvimos horas, muchas horas, porque resulta que justo ese día Marco también estaba con ellos, cosa curiosa, porque él sí ejerce la medicina y rara vez viaja con ellos, pero mejor para nosotros, porque así tuvimos todos los puntos de vista de la historia, aunque me habría gustado conocer al hermano de Santi, pero no se puede tener todo en la vida. En algún momento la tripa de alguien, que no diré que fue la mía, sonó como un rugido y Migue dijo que fuéramos a comer, nadie protestó y pronto estábamos caminando hacia un sitio que Lev juraba que era lo mejor que conocía en Dresde. Pues no se equivocaba, es de las mejores comidas que he probado y noté que Ricardo e Iván se sentaron a cada lado de Lev y tiré de Cami para terminar cerca de ellos en caso que Lev necesitara ayuda, pero la verdad se la pasó muy relajado y al final, cuando ...