1. AHORA SON DOS V


    Fecha: 22/12/2018, Categorías: Incesto Autor: XCITANTDLC, Fuente: SexoSinTabues

    ... llegaría a mi estación. Toño arreglo su indumentaria y yo hice lo mismo paro el metro y entre un embrollo de gente me dirigí a mi destino. No sin antes despedirnos con un beso y el en voz baja y al oído me dijo, esto no acaba aquí hermanita prepárate por que al rato seguimos. Al llegar mi hermano, yo ya lo esperaba en la entrada de la casa, enseguida me desabroche la cinta que sujetaba mi vestido abriéndolo por completo, ante su vista quedó mi escultural cuerpo semi desnudo, mi ropa interior, como era costumbre, era muy provocativa, lucía un coordinado de brassiere de media copa, liguero y pantaletas tipo tanga en color negro totalmente transparentes, medias del mismo color y sobre unas sandalias destalonadas de altos tacones, deje caer el vestido al piso y retrocediendo unos pasos le mostraba mi bien formado cuerpo como si estuviese modelando las piezas de lencería que lucía. Como impulsado por un resorte su verga endureció como pocas veces, vaya que había motivo, el carnoso, delineado y firme cuerpo de su hermana estaba a su disposición, la nítida ropa interior dejaba ver con diafanidad mi cuerpo, por arriba mis turgentes senos sobresalían majestuosos desbordándose del pequeño sostén con sus tiesos pezones, por abajo la vellosidad pélvica resaltaba bajo las transparentes pantaletas haciendo más abultado mi sensacional monte de Venus, por atrás mis poderosas nalgas eran un poema erótico perfectamente redondeadas y paraditas dignas de una colegiala contrastando con la ...
    ... brevedad de mi cintura y lo plano de mi vientre, aquellos apetecibles montículos de blanca y sólida carne devoraban las minúsculas pantaletas luciendo plenas ante su vista. El prominente bulto que hacia su verga bajo el pantalón era más que evidente y yo le veía constantemente sabedora con ello que me deseaba carnalmente, sus ojos no se cansaban de recorrer palmo a palmo el suculento cuerpo de su hermanita, quien había cambiado el ceño adusto por una sonrisa coqueta rayando en el descaro, con lentitud y procacidad se pasaba las palmas de mis manos sobre mis crecidas tetas, las bajaba por los costados de mi cuerpo juntándolas para culminar en mi vulva, en una clara invitación a que acariciara mi perturbador cuerpo. Con pasos cortos y contoneando mi ser con extrema cachondez me acerque a el que aún no reaccionaba ante la inesperada situación, le eche los brazos al cuello y rozando su oído con mis labios le dije susurrante "Verdad que deseas a tu hermanita más que nunca", yo repegaba mi vientre contra el bulto de su erección frotándome discretamente y mis senos se incrustaron en su pecho, inevitablemente sus manos se posaron en mis adorables nalgotas acariciando la suave piel de aquellos firmes y redondeados semi círculos de blanca carne, claro hermanita que aún tengo ganas de ti porque hoy en la mañana no fue lo suficiente Valery, dijo tímidamente, el movimiento de sus manos en mis glúteos se fue haciendo más descarado y procaz hurgando entre ellas en busca de mi vulva y mi culito ...