1. La leche de mi vecino


    Fecha: 28/12/2018, Categorías: Voyerismo Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    Las cosas que ocurren por mirar por las ventanas Hola. Mi historia sucedió hace años, cuando era pequeño. Es curioso las cosas que ocurren, que lo mismo pudo no ocurrir, pero sin embargo, pasó. Yo tenía unos diez años y es una edad donde se piensa en las cosas del sexo, pero tampoco sin mucho conocimiento y según lo vas descubriendo o lo vas oyendo con los amigos. Había visto a alguno de mis compañeros y amigos cómo se pajeaban en clase. Yo no me atrevía a tal cosa, porque soy un poco tímido y no se me ocurría hacer el guarrete como algunos de mis compañeros. Pero no voy a hablar de cómo miraba a mis amigos pajearse en clase o en los lavabos, sino de mi vecino. Mi vecino que vivía enfrente de mi casa, al otro lado de un patio interior, tenía más de 10 años que yo, unos 22 años, hacía deporte (jugaba al fútbol y creo que estaba apuntado al equipo de balonmano del colegio). No es que el club de balonmano de los antiguos alumnos del cole fuese una maravilla, jajaja, pero me figuro que estaría en alguna liga regional. Nos llevábamos bien las familias, pues nos veíamos todos los días, ya que éramos vecinos, obviamente. Yo le veía llegar algunas tardes calurosas con ropa de deporte y algunas veces sin la camiseta. Sí…, tenía buen cuerpo y un pecho y abdomen bien trabajado. Con 10 años, una persona de 20 te parece un adulto de otro mundo, muy alejado de mis planteamientos infantiles. Y voy a lo que pasó: no es que yo sea voyeurista: mi ventana da enfrente de la suya…, pero no es ...
    ... que me pase todas las tardes mirando por la ventana. Sencillamente, no se me ocurre. Y una vez, harto de estudiar en mi habitación, me asomé a la ventana que empezaban a encenderse las farolas (era la caída de la tarde). Vi el patio…, la calle al fondo, con sus coches…, vi la ventana de mi vecino, que había entrado en su habitación y había encendido la luz. Sentado y aburrido por los deberes y el estudio, solo miraba sin ninguna intención. Pero mi vecino, que acababa de llegar de la calle y estaba con ropa de deporte, empezaba a quitarse la ropa: ¡Anda!, me dio curiosidad en ese momento y se me quitó el aburrimiento y tedio que tenía entonces. Tanto mi ventana como la suya estaban con cortinas, pero al estar anocheciendo, habíamos encendido las luces y con luces, yo veía cómo se paseaba mi vecino por su habitación, buscando o dejando cosas. Llegó un momento en que se quitó la camiseta, se quitó el pantalón de deportes, se quedó en calzoncillos…. , y al final también se quitó los calzoncillos. Le vi desnudo, jejeje. Bueno, solo de espaldas, con su culo musculoso de deportista y sus anchas espaldas. Salió de la habitación y fue a la que estaba más allá de la puerta: el cuarto de baño. Se iba a duchar. Me quedé esperando a que saliese…, y salió. Salió con una toalla sujeta a la cintura, entró en su habitación, se quitó la toalla, le vi la mata de pelo que rodeaba sus genitales, pero en un instante muy corto pues se dio la vuelta, le volví a ver el culo, y se vistió. Me pareció ...
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