Hijas del Sol Naciente p3
Fecha: 05/03/2019,
Categorías:
BDSM
Fetichismo
Autor: pepejuxn, Fuente: xHamster
... suavidad, con movimientos felinos, hasta quedar su cara tan cerca de mi sexo que podía sentir su aliento quemándome. Abrió su pequeña boca, dejando la punta de mi pene atrapada entre sus labios carnosos. Suavemente empujó su cabeza hacia adelante, hasta quedar su boca completamente llena, a la vez que su lengua rozaba en círculos mi verga. Desde luego no era la primera vez que mi ama hacía aquello. No me sorprendía. La felación era una práctica bastante aceptada y extendida como premio a los esclavos por sus servicios, siempre y cuando éstos no derramaran su semen en la boca de sus dueñas. Algunas de mis anteriores amas ya habían practicado conmigo, pero con ninguna de ellas había sentido nada parecido a lo que aquella niña de quince años me hacía experimentar. La princesa era toda una experta en aquel arte, y cada vez que bombeaba mi pene con su boca, rozando mi glande con sus labios húmedos y calientes una descarga eléctrica recorría mi espalda. Una vez dentro de ella podía sentir su calor, la humedad de su saliva, pero al extraerme el contacto de mi polla mojada con el aire me producía un delicioso escalofrío que recorría mi cuerpo.Tan bien manejaba la princesa su boca que a los pocos minutos, y a pesar de haberme corrido ya antes, un nuevo orgasmo sacudió mi pelvis, y mi semen salió de mí con cuatro grandes impulsos. Tampoco ante esto se arredró mi dueña, que en lugar de sacar mi pene de su boca lo seguía devorando apasionadamente, hasta tal punto que ví como mi esperma ...
... se desbordaba por las comisuras de sus labios, cerrados en un estrecho círculo en torno a mi polla, que empezaba ya a relajarse.La princesa, con la boca cerrada, se separó de mí, y acercándose a gatas sobre mi cuerpo, acercó sus labios a los míos hasta que éstos se tocaron, y nos fundimos en un cálido beso, y mientras mi dueña entreabría mis labios con los suyos propios, una oleada de semen comenzó a entrar en mi boca ayudada por su lengua, que se movía dentro y fuera bombeando aquel precioso líquido cuyo sabor todavía permanecía en mi memoria tras el encuentro de la noche anterior con Makoto. Aquella sustancia espesa y cálida resbalaba ya por mi garganta, una vez vaciada de la boca de mi ama. Cuando la hube tragado, ella siguió con su beso profundo, y nuestras lenguas se rozaban la una a la otra, tratando de atraparse. Entonces pasé la mía por todo el interior de la boca de la princesa: por el paladar, por la parte interior de los carrillos, bajo su lengua… y sólo cuando no quedó ni una gota de él separamos nuestras bocas.Entonces se colocó de nuevo de rodillas sobre mi cuerpo, y me miró a los ojos con una sonrisa apenas perceptible dibujada en sus labios infantiles. Lentamente dirigió lamano derecha hacia su pubis, y empezó a acariciarlo sin piedad. Con sus dedos índice y medio separó sus labios, que dejaban ver la rojez de su vulva. Abrió los dedos aún más, y la entrada a su vagina quedó al aire como un maravilloso túnel cuya humedad pugnaba por escapar al exterior de su ...