LA HISTÓRIA DE MONTSE FERNANDEZ
Fecha: 07/03/2019,
Categorías:
Sexo en Grupo
Sexo Duro
Voyerismo
Autor: reininblack, Fuente: xHamster
... por elinmenso órgano genital del padre David Brown.Después de una lucha que se llevó diez minutos completos, Montse Fernández acabó por recibiraquella ingente masa hasta los testículos, que se comprimían contra su ano.Montse Fernández se abrió de piernas lo más posible, y le permitió al bruto que gozara a su antojode sus encantos.David Brown no se mostraba ansioso por terminar con su deleite, y tardó un cuarto dehora en poner fin a su goce por medio de dos violentas descargas.Montse Fernández las recibió con profundas muestras de deleite, y mezcló una copiosa emisión desu parte con los espesos derrames del lujurioso padre.Apenas había retirado David Brown su monstruoso miembro del interior de Montse Fernández,cuando ésta cayó en los también poderosos brazos de Ambrosio,De acuerdo con lo que había manifestado anteriormente, Ambrosio dirigió su ataquea las nalgas, y con bárbara violencia introdujo la palpitante cabeza de su instrumento entrelos tiernos pliegues del orificio trasero. 35 de 107En vano batallaba para poder alojarlo. La ancha cabeza de su arma era rechazada acada nuevo asalto, no obstante la brutal lujuria con que trataba de introducirse, y elinconveniente que representaba el que se encontraban de pie.Pero Ambrosio no era fácil de derrotar. Lo intentó una y otra vez, hasta que en uno desus ataques consiguió alojar la punta del pene en el delicioso orificio.Una vigorosa sacudida consiguió hacerlo penetrar unos cuantos centímetros más, yde una sola embestida el ...
... lascivo sacerdote consiguió enterrarlo hasta los testículos.Las hermosas nalgas de Montse Fernández ejercían un especial atractivo sobre el lascivosacerdote. Una vez que hubo logrado la penetración gracias a sus brutales esfuerzos, sesintió excitado en grado extremo, Empujó el largo y grueso miembro hacia adentro converdadero éxtasis, sin importarle el dolor que provocaba con la dilatación, con tal de poderexperimentar la delicia que le causaban las contracciones de las delicadas y juvenilespartes íntimas de ella.Montse Fernández lanzó un grito aterrador al sentirse empalada por el tieso miembro de su brutalviolador, y empezó una desesperada lucha por escapar, pero Ambrosio la retuvo, pasandosus forzudos brazos en torno a su breve cintura, y consiguió mantenerse en el interior delfebricitante cuerpo de Montse Fernández, sin cejar en su esfuerzo invasor.Paso a paso, empeñada en esta lucha, la jovencita cruzó toda la estancia, sin queAmbrosio dejara de tenerla empalada por detrás.Como es lógico. este lascivo espectáculo tenía que surtir efecto en los espectadores.Un estallido de risas surgió de las gargantas de éstos, que comenzaron a aplaudir el vigorde su compañero, cuyo rostro, rojo y contraído, testimoniaba ampliamente sus placenterasemociones.Pero el espectáculo despertó. además de la hilaridad, los deseos de los dos testigos.cuyos miembros comenzaron a dar muestras de que en modo alguno se considerabansatisfechos.En su caminata, Montse Fernández había llegado cerca del ...