No hay nada como una madura insatisfecha como Tere
Fecha: 05/09/2017,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: cartuz, Fuente: RelatosEróticos
... iba entrando, ella gemía más y más. Me miraba a mis ojos con mucha intensidad. Sin tenerla metida toda, agarre sus piernas y las coloque sobre mis hombros y agarrándoselas, se la metí del todo. Se quedó quieta unos instantes, no sé si para acostumbrarse al tamaño, para regocijarse o… el caso es que su coño comenzaba a manar líquidos como si estuviera orinando. -Es hora de que te muevas más fuerte, que no me puedo aguantar. - ¿Así de fuerte te gusta putita? A la vez que le daba buenos empujones. -Sí, sí, siiiiiii… reviéntame. Se corrió mirándome a mis ojos con cara desencajada, pero de calentura. Quito mis piernas de mis hombros y me atrajo hasta ella. Basándome lascivamente y susurrándome al oído… -Carlos, lo estás haciendo muy bien, eres increíble. Se nota que eres un experto, no es la primera vez con una mujer mayor que tú. Ahora me explico lo del metro. No quería parar, la di la vuelta, lamiéndola y mordisqueando su espalda, sus nalgas, su culito. Luego fui de nuevo a su cuello y al lóbulo de su oreja. Le decía auténticas obscenidades, se veía que a ella no le disgustaban, es más se movía más caliente cuando le decía, desde que ahora sería mi putita. Que la rompería por todos los lados con mi polla, que me la había mamado muy bien. Que luego me correría en su boca… Me fui colocando bien detrás de ella, hasta que encare mi polla con su coñito, ella facilito las cosas y empecé a embestirla. Sin nadie decirla nada se colocó a cuatro patas, lo que aproveche para tocarle ...
... las tetas, comprobando la sensibilidad máxima que tenían esos pezones durísimos. Mi ritmo follándola, era acompasado y subiendo poco a poco la velocidad. A ella se la notaba encantada. Por eso dirigí uno de mis dedos al estrecho orificio de su ano. Masajee su esfínter primero con delicadeza haciéndola estremecer de placer gracias a las caricias que la prodigaba. Introduje un dedo en su culito y ella dio un respingo. Pero una vez dentro se dejó, movía el culito más, me dispuse a meter otro dedo más para dejarlo preparado. Mientras gozaba como nunca con lo que le hacía en el culito y sin dejar de follármela. -No te creas que me la vas a meter por ahí, no te hagas ilusiones. -Tu déjame hacer a mí, que te hare disfrutar y gozar como nunca. -Mi marido con su micro polla, comparada con la tuya lo intento y me dolió a rabiar. Jamás le deje volver a intentarlo. -Tu marido es gilipollas hasta para eso. -Que no, que me da miedo. - ¿Es que no te gusta lo que te hago en este precioso culito que tienes? Si no te gusta me paro ahora mismo. -Ni se te ocurra, sigue, no te pares ahora. Me estás dando un placer increíble. Me encanta que me acaricien el culito así que sigue así que vas muy bien. -Ves zorrita como tengo razón, pues ya verás cuando notes mi polla dentro. Donde tienes alguna crema o aceite. -En el baño. -Pues trae lo que sea. Dejándola de follar. Se levantó y se dirigió al baño. Al ver el espejo de la cómoda, no me pude resistir, me levante de la cama y cuando ella llegaba con el ...