1. EL INOCENTE


    Fecha: 04/11/2017, Categorías: Gays Autor: Alonso70, Fuente: SexoSinTabues

    Cuando me divorcie hace 15 años, después de haber llevado una vida hetero por 15 mas, casi de inmediato conocí esta parte de mi sexualidad gracias a un amigo que es Medico, y que como me vio muy devastado anímicamente se ofreció a darme un masaje para des estresarme, una cosa llevo a la otra y termine siendo su amante por casi 7 años, todo esto ya lo conté en mi primer relato, lo que él nunca supo porque yo no le dije, fue de la vez que le fui infiel. Suena raro esto de ser infiel, ya que con él supe de las mieles de tener dos o hasta tres hombres incluyéndolo a él en una sesión de sexo, el mismo veía, me compartía o me ofrecía a otros tipos mientras teníamos sexo, por eso mismo pienso que ahí no hubo engaño, pero esto que voy a relatar, ni él lo sabe, nunca se lo dije, y no fue por amor, o pena o por sentirme mal por decírselo, no, lo hice para no ocasionarle problemas al tipo con el que lo engañe, bien empecemos. Después de haber descubierto esa parte de mi sexualidad gracias a mi Doctor, decidí seguir rentando el departamento donde vivía con mi ex, para tener un sitio donde poder recibir a mi amante, a veces me cogía en su casa, a veces en mi departamento, todo iba bien, jamás pensé que fuéramos a durar tanto tiempo. Durante los primeros meses de relación, tuve una vecina que se llamaba Laura, era poco mayor que yo, y tenía un hijo de 17 años, que padecía síndrome de Down, es un trastorno genético que altera la capacidad cognitiva del individuo que la padece, en otros ...
    ... palabras afecta directamente en sus capacidades intelectuales y crecimiento. El muchacho era torpe al caminar y un tano rebelde con su madre, lo conocí un viernes que llegaba de trabajar, y ellos venían de hacer el super, Laura llevaba varias bolsas y Héctor que así se llamaba su hijo, no le ayudaba mucho, como la vi apurada, me ofrecí a ayudarle, mientras sacábamos las bolsas de la cajuela del taxi Héctor se cayó con un par de bolsas que llevaba, corrí a auxiliarlo, y lo levante, hasta ahí me di cuenta del tamaño de ese niño, rayando casi el 1.80 mts. y con gran volumen y masa muscular, algo gordito y bueno como los que padecen ese síndrome, nada guapo, los ayude a llegar a su departamento y me despedí, a partir de ahí cada que Héctor me veía llegar si es que estaba a fuera de su departamento, corría a abrazarme, y yo le correspondía, nada mas pasaba por mi mente que la de ser su amigo, mis cosas sexuales sucias ya tenía con quien hacerlas, y no iba a involucrar este inocente. Una mañana de sábado tocaron a mi puerta, era Laura que tenía que ir a su oficina por un asunto urgente y como los sábados no abrían el centro atención donde dejaba a Héctor en las mañanas, me pidió cuidarlo mientras volvía, prometiendo no tardar demasiado, accedí y empezamos desayunando juntos, en un momento me distraje, y la cuchara con que comía el cereal resbalo de mis dedos y por querer recuperarla me tire encima el plato de cereal con leche, Héctor vio esto muy gracioso y comenzó a reír, a mi me gano ...
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