EL INOCENTE - Relatos Eróticos

EL INOCENTE

... la risa también, y no sé que entendió, pero tomo su plato de cereal, y lo derramo, en mi cara, y seguía riendo, eso ya no me gusto mucho, y tome el vaso de agua que tenia junto y se lo eche encima, seguimos riendo hasta que intento tomar la jarra de leche y tuve que detenerme diciéndole que era suficiente, mira nada mas el desastre que hicimos, voy a tener que irme a dar una ducha, y tu también lo harás amigo, ándale vamos el baño es amplio, me desnude, y entre en la regadera. Héctor se quedo parado viéndome sin hacer nada, entonces le dije, anda ven metete al gua, no me dijo, yo no sé, mi mami me baña, ¿Que cosa? No como es posible ya eres un chico grande como que tu mama te baña, si mi mami me baña, no dejaba de repetirlo entonces me puse la toalla en la cintura y me acerque a él, anda pues yo te voy a ayudar a bañarte, lo ayude a desnudarse, y desafortunadamente tuve que ver su herramienta, y wowww, estaba enorme como él, así flácida como se encontraba debió de medir fácil 16 o 18 centímetros mínimo, me puse algo inquieto pero me mantuve firme al final y lo metí a la regadera, empecé, puse el agua tibia y el parecía disfrutarlo, le di un estropajo y un jabón para que se lavara el cuerpo, pero solo lo sostenía entre sus manos sin hacer nada, entonces tome mi sácate (estropajo) y mi jabón y trate de enseñarle, así mira, y comencé a lavarme, pero nada, él seguía igual, me acerque y le dije haber te ayudo, y empecé a tallar su cuerpo con el jabón y el estropajo, el se quejo y ...

... dijo, hay, me raspa, duele, entonces tome una esponja y lo talle con ella, le pregunte mejor? y dijo si, así me baña mi mami, talle su cuello, y su espalda, su pecho y sus piernas por detrás, cuando estaba frente a él y baje para limpiar sus partes nobles, me puse un poco nervioso, pero lo hice, no niego que por un instante me quede observando es hermoso trozo de carne y una vez que lo enjuague quería meterlo en mi boca, pero aun así me contuve, terminamos, y nos vestimos, Laura llego y le platique lo ocurrido, sin incluir la fantasía que la verga de su hijo me produjo, nos despedimos y me agradeció, recuerdo que esa noche no pude dormir bien porque no dejaba de pensar en la verga de Héctor. Al cabo de unas semanas nos hicimos amigos, los viernes, veíamos películas, en su departamento o en el mío, acompañadas de palomitas, en uno de esos viernes, viendo Matrix, Héctor se quedo dormido en mi sofá, Laura, me pidió que le ayudara a llevarlo a casa, y le dije que si quería se podía que dar en el sofá, le lleve una almohada y un cobertor y la convencí de que se fuera a su casa y dejara a Héctor en mi sofá, cerré mi departamento, y empecé a limpiar la sala, de reojo vi a Héctor, y recordé la noche que no pude dormir pensando en su pene, entonces él se volteo quedando destapado, me acerque para taparlo pero vi su entrepierna dura, no sé si estaba soñando o qué pero claramente percibí una erección, me quede un instante, parado sin dejar de ver su entrepierna, hasta que el morbo pudo ...