La isla de los placeres mortales
Fecha: 20/06/2019,
Categorías:
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BDSM
Autor: reneamo, Fuente: CuentoRelatos
... eventuales encuentros que pudieran ser desafortunados. Por otro lado la tripulación colaboró con lo suyo, aun cuando Ebba se mantuvo durante gran parte del tiempo escoltando a Rouge, aunque esto sin embargo, no ayudó mayormente, más bien al contrario, puesto que las relaciones entre estas ambas mujeres, no eran las mejores, más aun cuando Ebba, no ponía nada de su parte, fastidiando y provocando a Rouge en el par de ocasiones en que apareció la latina, exhalando ardientes suspiros y mirándola fijamente, correspondiendo de la misma manera la morena, la que sabía muy bien que Rouge habiendo infringido las normas establecidas, cualquier otra falta agravaría aún más su pena, por lo que “El castigo”, del que había escuchado solo un par de veces, probablemente sería también mayor. La pregunta era: ¿Cómo participaría ella en el castigo?, ¿Será como se lo habían descrito?, tendría los privilegios de la “retadora” y Rouge el hándicap de la “castigada”, en un enfrentamiento realmente “a finish”, Paula si bien tenía claras expectativas de lo que se le venía a futuro, aun no tenía plena seguridad de que así fuera, y solo lo estaría en el mismo momento del encuentro, no puede ser tan alucinante y emocionante (terminó por meditar). Paula había tenido la oportunidad de hablar con el capitán la noche anterior, e informarse solo en parte, pero le intrigaba lo que el capitán había dicho textualmente, si bien lo recordaba: “puede que estés involucrada en el proceso”, pero no le explicó, cuál ...
... era el alcance de estas palabras, por lo que debía esperar a platicar con su nueva amiga Ebba, con quien no había tenido oportunidad de comunicarse en extenso desde la noche anterior, y al consultarle a Manuel por la mañana, él gentil varón, evitó hablar del tema. El día era apropiado para pasear, y los cuidados que se debían tener con las dos supuestas pendencieras ya no eran necesarios, ya que el motivo de su mal proceder, era la presencia de Paula y Ebba, quienes pudieron reunirse recién pasado el medio día, aprobando la proposición del capitán, quien previamente había hecho las indicaciones de cómo debían comportarse si deseaban bajar al puerto para recorrer los alrededores de este. Se les había sugerido a las muchachas que en cada oportunidad que bajaran de la embarcación, o se reunieran en público, vistieran de manera diferente, para que así no las asocien con algún espectáculo, y despertar en los fisgones curiosidad por las actividades que ellas realizan. Las dos chicas al bajar del yate, llevaban para la oportunidad unas reducidas y vistosas tenidas del mismo color, aunque con diferentes estilos, Ebba, una del tipo marinero, y Paula, una blusa y shorts, lo que incomodó un poco a Theodoridis, dadas las advertencias previas, en cuanto a no provocar la atención, aunque en el mejor de los casos, los curiosos podrían pensar que se trataría de un uniforme, como una manera de promover algún espectáculo artístico, un equipo deportivo, o bien algo parecido, que anduviera en gira ...