La isla de los placeres mortales
Fecha: 20/06/2019,
Categorías:
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BDSM
Autor: reneamo, Fuente: CuentoRelatos
... aplastando con el peso de su cuerpo, apretando con brazos y piernas las zonas más blandas y sensibles de su opositora, lo cual garantizaba los mismos resultados, o sea infligir castigo y dolor, autorizándoles este accionar a las más diestras de las luchadoras. Estas actitudes más agresivas, y que escapaban al propósito del espectáculo, se les permitía solo a algunas consentidas del equipo oficial, que realmente disfrutaban esta faena y que deseaban igualmente interesar a quienes gustaban de esta clase de extremos, valorando a las más agresivas y atractivas, contratándolas para que participen luego en enfrentamientos privados muy bien remunerados, más íntimos y permisivos La fornida y hábil morena sabía de estas ardides y sus beneficios, porque ahora las usaba a placer con la vencida y fatigada mujer, montada alegremente a horcajadas sobre ella, en actitud de soberbia dominación, dedicándose a humillarla, solo por diversión, con un dejo de maldad que evidenciaba en su mirada, cada vez que alzaba la vista para saberse observada por algunos de sus más ardientes admiradores, cuando el desenlace de la contienda, estaba totalmente definido a favor de ella. El réferi intranquilo por la situación, se dispuso terminar la contienda, sin embargo una parte de la concurrencia animaba a la morena latina, la que gratamente entusiasmada no quería renunciar a su tozuda determinación de proseguir atormentando a su entregada rival, en una absurda conclusión del combate. El gordo mediador ...
... anunció el termino del enfrentamiento, seguramente para evitar una mayor vergüenza y castigo a la extenuada perdedora, que de espaldas en el piso, inútilmente golpeaba con la palma de su mano libre la alfombra en varias ocasiones, en indudable señal de retiro y rendición, sin embargo la vencedora aun así se negaba a terminar con su porfiada actitud, por lo que el árbitro tomándola por uno de sus brazos la levantó, desmontándola, ante la evidente molestia de esta por tal decisión, alentando luego el mismo individuo a que el público aplaudiera, para así dar por terminado el match. Los aplausos se prolongaron por varios segundos, hasta que la derrotada irrumpió con insultos y gritos, lo que la joven vencedora soportó con estoica actitud. No conforme con esto, la odiosa e irreflexiva rubia le arrojó un grueso escupitajo, que la hábil morena esquivó con un rápido movimiento de sus caderas, a la vez que alzaba una de sus fornidas piernas, y dándose impulso, dibujó en el aire un rápido arco con ella, golpeando con su talón la barbilla de la perdedora, que se fue de bruces al suelo. El árbitro se movió prestamente, tratando de evitar la acción, pero fue tan rápida esta, que antes que pudiera intervenir, la morena ya había dado cuenta de la torpe y grosera mujer. Los vítores se repitieron, el público estaba más que satisfecho con el número extra, la triunfadora con el brazo sostenido por el referí recibía la ovación, mientras la malparada adversaria era ayudada por algunas compañeras a ...