Dulce y amarga amistad (03)
Fecha: 05/08/2019,
Categorías:
Gays
Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos
... tres, a veces abrazados, y otras con el resto de los amigos de su primos. Las horas pasaron y comenzaron a retirarse como cuentas de un rosario, lentamente cada uno o haciendo pareja fuimos abandonando el local. -Si queréis os puedo acercar hasta casa en el coche. –Alberto y su amabilidad, me rodeó la cintura con su brazo para acercarse a mi oído. -Tenemos que estar, te debo una. –Me hablaba a mí pero miraba a nuestro común amigo. -Aún me quedan un par de días, déjame con Álvaro, aún me necesita. –Lo cierto es que lo aventuraba y no sabía, pero quería estar a solas con él para saber lo que pensaba. Emprendimos el camino hacia su casa, caminando uno al lado del otro, cercanos y alejados a la vez. Como la mayoría de las noches en la montaña hacía frío, y además un suave viento lo aumentaba. Había luna llena, con el cielo despejado haciendo posible ver la impresionante Vía Láctea. La calle discurría con un terraplén a la izquierda protegido por un murete de piedra y rematado por la barandilla de hierro. Me detuve y miré el inmenso cielo estrellado. -¡Es precioso! –Me estremecí sintiendo el frío de la noche. Mi amigo se quitó la chaqueta y la colocó sobre mis hombros. -Vamos para casa o mañana tendrás que quedarte enfermo en la cama. -Paso el brazo por mis hombros y avanzamos hasta llegar al abrigo cálido del hogar. Nos dimos una ducha muy caliente y después de lavarnos la boca nos fuimos a acostar. Estábamos cada cual en su cama y me giré para mirarle, hubiera preferido ...
... compartirla con él pero no lo sugirió. -¿Estas arrepentido de lo de ayer? –Estaba cubierto por la ropa de cama y solamente dejaba ver mis ojos. -¿Qué dices? Estás loco. He pasado todo el día queriendo repetirlo y no sé si tu lo quieres y en como tendrás el culo. –Álvaro se había puesto rojo. Salte de mi cama para ir corriendo a la suya y me cobije bajo las mantas abrazándome a él. -Eres un amante delicado y perfecto, por mi culo no te preocupes ya está bien y recuperado. –Se estaba muy bien a su lado, sintiendo su calor envolvente, su cálido aliento rozando la piel de mi cara. Me mantenía abrazado besándome la frente. -Tenía miedo de que estuvieras arrepentido y nuestra amistad se hubiera malogrado. –Le cogí una mano entrelazando los dedos. -¿Puede haber algo serio entre nosotros? Creo que te quiero Jesús, mejor dicho, lo se. –Pasé mi brazo debajo del suyo, lo atraje empujándole de la espalda y escondí la cara en su cuello. -Yo también te quiero, lo sabes, y mucho, pero somos muy jóvenes, tenemos que vivir la vida, y conoces que no soy muy fiel, tú mereces algo mejor y además aún no tienes decidido si eres gay, bisexual o no eres ninguna de esas cosas, es mejor que lo dejemos así, como hasta ahora, amigos que nos queremos. –Me miró elevando las cejas, en un gesto de enfado que conocía muy bien. -Quiero, necesito estar contigo Jesús, no me digas lo que siento listillo no te busques disculpas que no existen. –Me había soltado y ahora miraba al techo con gesto frustrado y adusto. -Anda ...