Los amigos de mi mujer (3) Hugo
Fecha: 10/11/2017,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: komo, Fuente: CuentoRelatos
... respirar. Tal era la intensidad del orgasmo que habíamos alcanzado ambos, que quedamos inmóviles, aunque jadeantes durante unos minutos… -Gracias... -susurró en mi oído cuando se recuperó. -Soy yo, quien te las tiene que dar a ti... porque me has hecho descubrir algo... nuevo... muy rico... gracias, mi amor. Nos dormimos casi inmediatamente. Cuando desperté a la mañana siguiente, Marta ya no estaba. Se había marchado al trabajo. Me levanté, y tras asearme y afeitarme, fui a la cocina a desayunar. De forma mecánica me serví café, y puse unas rebanadas en la tostadora. Mientras esperaba por las tostadas, vi que sobre la bancada de la cocina, había una nota, y sobre ella, estaba el mando a distancia del huevo. La nota decía escuetamente: -"Cariño, ven a verme al trabajo"… ¿Qué quería decir aquella nota?... ¿Quizás Marta quería calentarme poniendo a la vista el mando del huevo?… o, ¿quizás quería decir que se llevaba puesto el huevo, y me esperaba para que yo lo pusiera en marcha?… mientras desayunaba, me convencí de lo segundo... pero además, comprobé que el huevo, no estaba con los otros juguetes que habíamos comprado… Metí el mando en el bolsillo del pantalón, y cogí el coche, camino de los grandes almacenes… mientras en mi cabeza, no cesaban de componerse las mil y una escenas, (cuál de ellas, más morbosa y atrevida), que podrían tener lugar cuando llegara a mi destino… y localizara a Marta… Marta llegó al trabajo, puntual, como siempre. Saludó a su jefe, con un alegre ...
... -"Buenos días"-. Su cara irradiaba alegría. No es que Marta otros días no estuviera alegre, pero, esa chispa que se delataba en su cara, no era habitual. Saludó igualmente a otros compañeros de trabajo, quienes también notaron algo extraordinario en su forma de hablar, en su lenguaje corporal. No sabrían decir qué era, pero, algo nuevo sucedía con Marta. Silvia, de la sección de Lencería, se acercó a saludarle. -¡Hola Marta!... -¡Hola, Silvia!... ¿qué tal? -Pues he venido a decirte, que ya hemos recibido los pedidos de lencería de esta temporada... ya sabes… me dijiste que te avisara cuando llegaran… -¡Ahh!... no me acordaba... gracias Silvia... eres un amor… - y seguidamente le dio un beso en la mejilla, muy cerca de los labios… Silvia se quedó parada, con una mano sobre el beso que le acababan de propinar… de hecho, estaba calibrando con qué intención habría estampado Marta el beso… porque ese beso... -¡joder!... ¡ya me he mojado las bragas!-... tuvo que decir para sus adentros… y es que a Silvia... Marta le hacía "tilín" desde hacía mucho tiempo. Se recompuso y dijo: -Marta... en un par de horas tendremos montado el escaparate, y colgadas las prendas en el expositor... si quieres pasar más tarde, a verlas... "(y de paso, aprovecharé para acariciarte alguna teta, y si me dejas, te comeré el chochito, o me lo comes tú a mí, que también me gustaría"… -pensó-)… -te las mostraré con mucho gusto. Silvia no esperó a la respuesta de Marta. Se dio la vuelta, y mascullando algunas ...