Mis dos familias - 10 de 10
Fecha: 11/11/2017,
Categorías:
Gays
Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos
... con su dura verga en mi próstata y me abrazó muy fuerte por la cintura mientras me besaba el cuello y mordía la oreja. Sentía que su orgasmo se precipitaba escuchándole gemir en mi nuca, al tiempo me retorcía eyaculando sobre la corteza del árbol. Escuchaba sus gruñidos a la vez que llenaba el condón con sus fluidos. -¡Telmo, Telmo! Me corro. -apreté el culo para exprimirle hasta la última gota de leche que entre estertores despedía. Quedó un par de minutos pegado a mi espalda, con la verga dura en mi culo, respirando dificultosamente en un abrazo posesivo de macho que no quiere soltar a su pareja. Se separó y me ayudó a subirme la ropa, por lo menos no tendría el problema de que su semen me corriera por las piernas, había quedado todo almacenado en el condón y escuche como lo sacaba de su verga y lo tiraba. -¿Estás bien Telmo? -No lo se, pero lo repetiría si pudieras. -soltó una alegre risa y me ayudó a subir la ladera hacia las luces que brillaban a lo lejos. Buscamos sin poder localizar a Carla y la envié un mensaje de que nos marchábamos para casa. Álex había traído su coche y yo había llegado con Carla y Francisco. Me llevó hasta la puerta de casa y no quería bajar del coche, me resistía a dejarlo que ahora se fuera.. -Telmo, quédate conmigo, vamos a mi casa, pasemos la noche, dentro de unos días partirás, nos queda poco tiempo. -me estaba pidiendo justo que lo deseaba escuchar y lo sujete del cuello para besarle apasionado. Volvimos a la ciudad, a su casa donde estaba ...
... todo en silencio, dejamos el coche en la calle para no abrir las grandes puertas del jardín y entramos sigilosos como ladrones. Aquella fue la noche del encuentro, al entrar en su habitación comenzó a desnudarme. -Déjame que envíe un mensaje a casa para que estén tranquilos. -lo envié mientras me dejaba desnudo mirándome incrédulo los testículos, siempre causan admiración o hasta temor. Mensaje a Don: “No os preocupéis, llegaré tarde y estoy con Álex” Suficiente para que me entendiera. Tiré el móvil sobre una mesa después de callarle para que no sonara y le ayudé a quitarse su ropa. Lo primero que hizo fue llevarme al baño donde el uno al otro acariciábamos con la disculpa de limpiarnos, me palpó los gordos testículos delicadamente, pasando las manos enjabonadas por ellos. -Es increíble, pareces un toro. -ya me lo había dicho alguien más, me hacía reír de gozo al ver que aquello que resultaba anormal a él le encantaba. Terminé arrodillado sobre la loza ofreciéndole mi trasero y él, de pie, volvió a entregarme su polla que veía por vez primera, más o menos resultaba del tamaño de la de Don, y que en Álex, al ser más delgado, parecía más grande. Indudablemente más potente si que era y durante esa noche lo comprobaría. Resultó una noche lujuriosa donde pude mamarle la polla, hasta derramarse en mi boca y saborearle el semen, gozar de cada rincón de su cuerpo y hablar entre follada y follada. Saber que Álex no era el inocente chico que yo creía conocer, quizá él tampoco esperaba ...