Enseñando a mi hermanita - Relatos Eróticos

Enseñando a mi hermanita

... que le ocurrió lo mismo y abrió su boquita dejando salir la punta de su lengua, cuando entraron en contacto poco falto para que entrasen en confianza y comenzó un juego entre ellas, le metía un poco mi lengua en su boquita y luego retrocedía haciendo que ella fuera la que buscase en mi boca mi lengua, le chupaba suavemente su lengüita, sus labios… no se decir pero en un momento nos comíamos como si fuéramos unos enamorados de siempre, ya no había marcha atrás y comencé acariciar su cuerpo su cara, sus piernas, su culito, su barriguita y ella entonces también cogió la misma iniciativa de acariciarme, estuvimos un buen rato hasta que ella me cogió la polla y al yo quedarme quieto ella retiro su mano y me pidió perdón, yo me di cuenta de la situación y le dije que ya estaba bien por hoy, ella me dijo que no me enfadara, le dije que no lo estaba y que era mejor dejarlo ya, me levante fui al baño y me jale una buena paja por todo lo que había pasado.
Cuando estaba acostado por la noche Sofía vino a mi cama y me dijo que si se podía quedar que tenía miedo, bueno le dije y se metió en la cama, estuvo bien lo de esta tarde Fran a mí me gustó muchísimo, si no estuvo mal le dije, no decíamos nada y me dijo podemos besarnos un poco otra vez, bueno mañana ya veremos, no Fran ahora a mí me gustaría seguir un poco, bueno si es un poco vale, yo estaba desnudo me gire hacia ella y me di cuenta de que solo tenía puestas unas braguitas, la bese suavemente en sus labios y comenzó la locura la ...

... comencé acariciar por su barriguita y llegaba a sus tetitas que solo eran unos pezoncitos hinchados y que cuando se los acariciaba notaba como ella se estremecía toda, ella también me acariciaba también por los mismos sitios que yo le hacía, estábamos locos, lleve mi mano al inicio de sus braguitas e introduje mi mano que fue directo a su chochito que estaba hinchado gordito pero también empapado, eso la volvió loca pues casi me quería comer la lengua, le surcaba con mis dedos su rajita hasta llegar a su botoncito y ahí ella estiro su mano y me cogió la polla y la meneaba mientras la apretaba, me desprendí de su boquita y me agarre a uno de sus pezoncitos y se lo chupaba como el que quiere sacar leche aunque no la haya entonces ella dio dos o tres suspiros grandes y se quedó quieta como si se hubiera muerto, se había corrido y me di cuenta me levante rápido fui al baño y apenas me la toque comencé a echar leche a borbotones por mi polla, me limpie y volví a la cama ella estaba acurrucada a un lado me acosté y ella no me decía nada, estaba asustado le pedí perdón y le dije que no volvería a pasar que no dijera nada, se giró rápidamente y me dijo que quería que lo siguiéramos haciendo siempre pues le había gustado mucho, le dije que ya lo veríamos al otro día con más tranquilidad, me costó muchísimo coger el sueño.
Al otro día al ser miércoles mis padres estaban en casa y me fui con mi amiga y echamos un buen polvo, cuando llegue a casa salude a mis padres y Sofía estaba con ...