1. ALIMENTACIÓN FORZADA


    Fecha: 28/05/2019, Categorías: Dominación Tus Relatos Autor: sumisso2, Fuente: RelatosEroticos-Gratis

    ... a mí y comprobé como  llevaba una sonrisa enorme en su rostro. 
    
    - Estoy haciendo lo que debería de haber hecho hace mucho. Te voy a quitar la chulería - Me respondió. 
    
    En un momento quedé esposado duramente  con mis manos atrás sujetas a los barrotes de la silla. Unas cuerdas atadas a mis tobillos y a las patas de la silla y para terminar otra cuerda alrededor de mi cintura sujetándome a la silla sin poder moverme. 
    
    Dolores se acercó de nuevo hacia mí con algo en su mano. Agudicé la vista y comprobé como agarraba un collar de perro en sus manos. Abrió las hebillas y lo colocó sobre mi cuello y lo cerró ajustándolo contra la parte superior de la silla, de tal forma que mi cabeza quedaba pegada a la silla sin poder moverla. Cerró las hebillas y comenzó a reírse observándome.
    
    - ¿Qué haces?, suéltame, me aprietan mucho las esposas - La recriminé airado.
    
    - Me alegro, es lo que pretendía, que te hiciesen  daño - Me contestó burlándose de mi. 
    
    La señora Dolores se paró frente a mí y comenzó a reírse de mi situación, no podía moverme un solo milímetro, estaba completamente atado a la silla. Esposado, rodeado por numerosas cuerdas tanto en mis piernas como en la cintura y para rematar sujeta mi cabeza por un collar de perro a la silla manteniendo mi cabeza inclinada hacia arriba..
    
    Mi suegra me inmovilizó a la silla sin apenas poder oponer resistencia. Dolores es una mujer con una gran corpulencia, voluptuosa, unos brazos y piernas grandes y anchos. Tiene mucha ...
    ... más fuerza que yo, ella sobrepasa sobradamente los 100 kilos de peso. Es muy grande y sin ánimo de ofender bastante obesa. Agarró un delantal de talla muy grande como de plástico y se lo colocó introduciendo su cabeza por la abertura del delantal. El mandil cubría su cuerpo hasta sus rodillas, sujetó unas tiras de tela que llevaba a ambos lados y las cerró anudándolo sobre su cintura.  Estaba asustado observando sus movimientos y como se colocaba el delantal ¿que pretendía?
    
    - ¿Que estás haciendo? - La pregunte asustado.
    
    - No pretenderás que me manche. Ahora vas a comer toda la cacerola, no vas a dejar una migaja te lo prometo  -  Me dijo en un tono  amenazante. 
    
    Se acercó hasta la mesa y destapó la cacerola. Quedé completamente impresionado y asustado al ver su contenido. Era uno de sus famosos guisos grasientos pero esta vez estaba completamente triturado. Había sido pasado por una trituradora hasta hacerlo añicos. Era una masa pegajosa llena de tropezones. 
    
    - Me he molestado en triturarlo para que te lo comas mejor. Lleva patata, carne, verdura, zanahoria y un sinfín de ingredientes. Ah y para que pase mucho mejor le he añadido, leche, mantequilla y restos que tenía. Me ha costado mucho tiempo triturarlo.-  
    
    - No pienso comerme esta basura, apártalo inmediatamente - La reproche de muy mal humor y asustado.
    
    - ¡¡Ohhhh ya lo creo que te lo vas a comer¡¡, me voy a encargar de que así sea, vas a comer toda la cacerola, no vas a dejar nada  - Me dijo de forma ...
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