Noches mágicas - Acto II
Fecha: 17/11/2017,
Categorías:
Gays
Primera Vez
Autor: SirLawrence23, Fuente: xHamster
... deliciosa como la que estaba recibiendo. Sus lenguas jugaban y se deslizaban por mi capullo; sentía como era chupado por los labios de uno y otro, lo sentía entre medias de ambas bocas, siendo cómplice de una batalla de besos donde lenguas, dientes y labios se esforzaban en acabar la tenaz resistencia de un enemigo que intentaba mantenerse rígido y duro en la batalla. Sólo cuando se inició un inesperado ataque por la retaguardia –primero un dedo, que alternaban uno y otro, sacándolo y metiéndolo sin compasión; y luego ambos dedos- lograron que el final de la lucha llegara. El guerrero acabó rindiéndose. El tributo de su derrota salió de nuevo disparado entre ambos contendientes que recibieron con deleite el fruto de una nueva batalla ganada al placer y a los sentidos.Fue un largo y delicioso orgasmo que duró varios minutos. Sus dedos seguían en mi culo y ello me hacia seguir teniendo espasmos que parecían no tener final. Creí perder el sentido con tanto gozo. Mi ano se volvía por momentos más y más sensible.- Parad, me va a dar un infarto – les pedí.Ellos, con una suavidad exquisita, sacaron los dedos de mi culo, pasaron la lengua un par de veces por el exterior y se tumbaron de nuevo a ...
... mi lado para besarme el pecho y el cuello. Les acaricié ligeramente el cabello y les dije.- Humm, ha sido estupendo. Habéis hecho que me corra como nunca, ¡qué gusto! Sois estupendos chicos, gracias…- Pues todavía no hemos hecho más que empezar. La noche es joven.- contestó René.- Si, porque esto es el aperitivo, la comida la saborearemos despacito: dos platos y postre, ¿no crees René?- añadió Sergio sonriendo.- La verdad Sergio es que yo estoy deseando saborear esos dos platos y el postre. Sólo de pensarlo me excito de nuevo, pero creo que deberíamos descansar un rato y comer algo para reponer energías – apuntillé. - De acuerdo, pediremos unas pizzas.- ¿Más “pichas”? – bromeó René – Y algún donuts de recambio ¿no? – Y acabó riéndose de su ocurrencia.Sergio se levantó y pidió un par de pizzas por teléfono. Yo me quedé en la cama acariciando la verga de René, pensando que se podría sentir si la lograba alojar por completo dentro de mi culo. Ya me la imaginaba dentro, transportándome al séptimo cielo y destrozándome de placer. La tensión y la espera me comían las entrañas, así que me levanté y fui al cuarto de baño para orinar y refrescarme un poco. Aproveché este descanso y me di una ducha.