POR GUACHA Y POR PUTA ME HICE ROMPER EL CULO - Relatos Eróticos

POR GUACHA Y POR PUTA ME HICE ROMPER EL CULO

... principio sentí un poco de asco, recuerdan que les decía que cuando largaba el polvo sentía como que me estaba cagando. Con asco y todo se la chupaba rabiosa por ponerla dura de nuevo, el loco se dio cuenta porque hice unas arcadas, pero gozando la mamada de una guachita tierna y bastante buena y habiéndome cogido el culo de la manera en que yo me lo había hecho coger. 
Ni se inmutó por mis arcadas, y sobrándome dijo, “bueno guachi, algún sacrificio tenés que hacer, después de hacerte coger el ojete y gozarme la verga como me la gozaste un poco de caquita junto con la leche que en cualquier momento te voy a largar no es tanto problema”, yo emputecida del todo, le limpiaba la garcha totalmente untada de mi leche y mi caca, le dije: “no te preocupes, no pasa nada, se te habían pegado algunas cascaritas de mi caquita, pero yo te la voy a dejar bien limpita”. 
(no se como aguanté las arcadas, tenía el estómago revuelto, pero quería hacer buena letra- después con el tiempo aquello me empezó a gustar, y era otro de los detalles que me hicieron fama. No solo mi ojete les bancaba cualquier pedazo sino que se los devolvía limpitos.) 
Justo ahí, agarrándome bien fuerte de la nuca, con su verga casi asfixiandome me empezó de leche la boca, sin chance de apartarme a un lado y viendo como apretaba mi nuca, entendi el mensaje y me la fui tragando toda. 
Ese día debuté no solo con una guasca imponente de gruesa y larga sino que por primera vez me rompieron el culo y también por ...

... primera vez me habían mostrado la yegua que tenía adentro y además de mamar una verga por primera vez, me tragué toda la leche. 
Mi novio no me la hacía tragar, pero ésa tarde con la calentura que tenía no tuve ni una sola duda se la tragué con gusto a pesar de que fue un montón de leche, que me costaba ir tragando sin que no se me cayera nada para afuera. 
Era tanta la calentura que algunos chorritos que tenía en la cara y en los ojos, los fui juntando con los dedos y me los chupé hasta que no quedó nada. 
Me dijo que me diera un baño para que no se me notara tanto que había estado garchando. 
No sabés la cara que tienes. La verdad guachi que no me imaginé que te fueras a emputecer de esta forma. Parecías una yegua, tu ojete me comió la verga como muy pocas hembras me la han comido. Y tu con tu culito virgen, apenas te quejaste un poco al principio y despues lo unico que hacias era pedir mas y largar leche. 
Cuantos polvos largaste, me pregunto.
Con mi mejor carita de puta, mirándolo a los ojos, le respondí,  papito tus dedos me sacaron uno de la concha y a tu verga mi culito le dio leche 7 veces.
No te digo, yo pensé que le iba a romper el culo a una guachita calentona y resultaste ser bruta hembra.
Aquel comentario me hizo sentir de nuevo caliente, yo todavía le estaba agarrando la pija, haciéndome la chota con ganas de que me cogiera un poco la concha, bobeando y bobeando se la puse dura otra vez y tirando de su guasca lo llevé a la cama, me tiré de patas abiertas y le ...