1. Una buena capacidad de entrar...


    Fecha: 07/04/2020, Categorías: Gays Tus Relatos Autor: Fernando, Fuente: RelatosEroticos-Gratis

    ... de sudor en su frente o en su torso. Me encanta el sabor salado de la transpiración. Además, en su caso, se debe mezclar con el aroma masculino de sus feromonas !... Y Dios sabe qué cantidad los organismos jovenes y sanos como los suyos producen !
    
    No podía evitar mirar su sexo bambolearse en todas direcciones en sus largas bermudas. Me pregunté si llevaban calzoncillos, porque sus miembros parecían totalmente libres. El tamaño de sus aparatos en reposo parecía muy impresionante en ambos. Es cierto que los morenos están generalmente bien dotados, y ellos además eran dos atletas tamaño XXL...
    
    Los shows de baloncesto de calle atraen normalmente muchos aficionados, y la exhibición desata la locura de los niños y de los amantes del basket. Ahora bien yo era el único espectador, y en cada cesta aplaudí en voz alta, felicitando a su autor con un "Super ! Bravo !". El muchacho, halagado, se daba la vuelta hacia mí, y me daba las gracias levantando el pulgar en el aire. El chico menos alto (pero que medía al menos 1,85 o 1,90 metro de altura...) - el que tenía la piel menos oscura - además del pulgar levantado en el aire, me daba una hermosa sonrisa que me conmovía cada vez. 
    
    En un momento, su compañero le habló, y luego dejó la cancha, saludandome con la mano antes de alejarse. Su compañero se acercó a mi, la pelota debajo del brazo, y me preguntó si quería jugar con él. Le sonreí, pero le expliqué que estaba totalmente incapaz de hacer malabares, piruetas o giros como él ...
    ... y su compañero. Y aún más encestar la pelota ! El muchacho estaba a horcajadas sobre el muro donde me había sentado a ver el "show". Sus grandes piernas dobladas frente a mí, sólo la rodilla y el comienzo de sus muslos sobresalían de sus bermudas. Él estaba tan cerca que bien podía ver la musculatura de sus delgadas pantorillas saliendo de los zapatos blancos. Este cuerpo, que había tan examinado de lejos cuando se doblaba, y luego, de golpe, se lanzaba hacia arriba para llegar a la canasta, este cuerpo estaba ahora a pocos centímetros, tan cerca de mí que perdía todo dominio... Podía sentir el olor del sudor mezclado con el perfume más fuerte de su hombría. Qué rico tener al alcance de mi mano a un niño tan guapo, tan sano... tan perfecto !
    
    Pero no tuve el valor de hacer el más mínimo gesto hacia este extraordinario objeto de deseo. Ni siquiera poner sólo una mano sobre una de sus rodillas... Habría así podido experimentar esa sensación divina del calor de un cuerpo ajeno ! Miré de reojo hacia su entrepierna, para ver si su miembro, tan móvil durante las piruetas y las carreras del juego, era todavía visible bajo la tela. Y, de hecho, pude ver claramente el tronco, largo y grueso, pegado contra uno de sus muslos, debajo de las bermudas. Pensé : si lleva calzoncillos o boxer, su verga habría sido contenida e incapaz de deslizarse así por uno de sus muslos. Esto demuestra que el cabroncito no tiene ropa interior, y que su miembro va donde quiera !... Esta observación me lo ...
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