Mi madre, mi primer amor y mi primera mujer poseida por mi. Primera parte
Fecha: 13/01/2018,
Categorías:
Incesto
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... sino que me volveré a quitar las bragas y así iré repitiendo hasta que alcances una erección. Vale mamá. Yo está vez ya estaba con la erección, pero no se lo dije para no perderme la visión que mi madre me había prometido. Mi madre se metió en la cama, me dio un beso y acto seguido se levantó e hizo lo prometido. Volver a verla así de nuevo después de tantos años me estaba produciendo un gran placer que fue en aumento al ver como se iba poniendo las bragas pues lo hacía con un contorneo de caderas que me puso a cien. Me preguntó , hijo ya está arriba el tesoro. Lo estaba, pero yo conteste que no para seguir disfrutando de aquella visión. Ahora se quito las bragas cual si fuese una profesional del striptease; estaba claro que mi madre se había desinhibido por completo y parecía gozar de lo que hacía. Después de tres subidas y bajadas me volvió a preguntar, yo dude un momento y entonces antes de que yo dijese nada se volvió cubriéndose el chochín con una mano y las tetas con la otra y me dijo: a ver cómo va la cosa; y con la mano que le tapaban hasta ese momento las tetas me destapó y vio mi erección diciéndome: pillín la tenías ya tiesa y te lo callabas para seguir viendo el striptease de tu madre. Pero lo dijo sin reproche, más bien todo lo contrario pues parecía contenta de que su hijo o sea yo disfrutase de su desnudez. Hijo, ahora vamos examinar ese "tesoro" . Sólo puedo compararla con la tu padre. La suya es más larga pero más estrecha, la de tu padre es como un palo, ...
... la tuya es más ancha y más corta pero más proporcionada y no te lo digo por despreocuparte también es más bonita. La de tu padre da miedo, perece un sable, en cambio la tuya está para comérsela. Me dijo: ahora te intentaré bajar el prepucio. Le conteste: mamá, ten mucho cuidado. Su mano izquierda seguía tapando su chochín y con la derecha me intentó bajar el prepucio, pero no pudo pues enseguida di un grito de dolor. Perdona hijo, debe ser fimosis, cuando venga tu padre que te lleve al médico amigo suyo. Te lo tendrás que arreglar porque sino no podrás hacer el amor ni follar, ya que para introducir el pene en la mujer debe estar el glande fuera. Pero mamá, hacer el amor y follar ¿no son la misma cosa? No exactamente me contestó y yo estuve a punto de preguntarle la diferencia y si ella con mi padre hacia el amor o follaba. Luego acarició mi erecto pene con mucha suavidad y le dio un beso que a mí me puso a cien. Hijo me perdonas por el bofetón. Claro mamá, pero puedo pedirte dos cosas más. Claro cariño, me contestó. Tomé su mano derecha y le dije la primera mamá es que me des otra bofetada y la segunda es que me la des con la mano izquierda ( que era con la que se cubría su sexo). Me contestó, pillín tú lo que quieres es verle el chochín a tu madre, pero no te voy a dar ninguna bofetada y lo del chochín lo dejaremos para otro día mi vida. Bueno mamá, pero por lo menos deja que te lo roce con la punta de mi poya. Cierra los ojos hijo. Yo estaba sentado al borde de la cama con ...