Confidencias 14 Rubén me folla como la primera vez
Fecha: 17/01/2018,
Categorías:
Gays
Autor: Alvaro-L-de-H, Fuente: SexoSinTabues
... Volvimos a mi habitación para vestirnos y mi primo se tiró en la cama. -Parece una casa de las que salen en el cine. Rubén cuando ha estado aquí no ha pasado del pabellón de la piscina donde recibían a los invitados, lo mismo que me sucedía a mí. Me tumbé a su lado. -He quedado con Simón para ir a la tarde a una fiesta juvenil y le he pedido que coja entradas para los dos. Se quedó un momento callado buscando con su mano la mía y cuando la encontró cruzó los dedos apretándomela con fuerza. -Tu padre ya no está en tu casa, ahora están solos tu madre y Pablo, fueron a buscarle unos hombres y organizaron una escandalosa trifulca en el jardín hasta que llegó la policía, los llamó mi padre creyendo que pasaría algo tremendo, los gritos eran para asustar. Tu madre le dijo que no lo soportaba más y que se marchara, que ya le prepararía ella sus cosas para que fuera a recogerlas. Me miraba esperando algo de mí, como si yo pudiera obrar un milagro y conseguir que todo funcionara perfectamente si ni siquiera podía organizar mi vida. Intentaría hablarlo con Eduardo, en realidad temía que pudiera pasar algo malo a papá. Estaba dispuesto para contestarle cuando cambió de tema. -¿Dónde folláis? Mejor dicho, ¿dónde te coge Eduardo? No me esperaba esa pregunta y me puse rojo. -Venga, no es para tanto, ¿o no hacéis nada? -Sí, en esta misma habitación pero solo han sido dos veces. Entonces se echo a reír mientras me besaba la cara. -¡Cuéntame!, ¿cómo es en la cama? ¿Qué hacéis? Me vi ...
... forzado a contarle un poco de todo. -Esas pastillas que toma son para que la verga se le ponga dura, seguro, ¿las tomas tú también? -No, ¿qué crees? No necesito tomar nada. Intentaba quitarle importancia y hablar de otras cosas. -No sé, igual no se te levantaba al follar con un viejo. No entendía lo que quería decir, Eduardo aún estaba bien aunque fuera mayor y tuviera que ayudarse, era fogoso y sabía darme placer. Al fin llegó la hora de comer y pude descansar de su interrogatorio, antes teníamos menos secretos y ahora me costaba abrirme a Rubén. --------------------------------- Mi primo pulsó el botón del intercomunicador para hablarle a Damián. -Déjenos después de aquel paso de peatones, al lado del semáforo. El conductor detuvo el coche donde Rubén le había indicado. -¿A qué hora paso para recogerles? Nos miramos los dos, y fue él el que le respondió. -A las diez estará bien, en este mismo lugar. Al abrir la puerta golpeé a un paseante que pasaba al lado del coche, era un grupo de chicos y chicas y él iba el último. -¡Perdón! Lo siento, no me di cuenta. Me dirigí al chico que había golpeado, se frotaba la pierna como si le hubiera causado daño. -¡Mira para ver lo que haces niño! Una chica me miraba enfadada hablándome con tono grosero. -No ha sido nada, no me he roto la pierna. En ese momento me fijé más en el chico. Debía tener como unos veinte años, la edad de todos ellos más o menos, moreno y con barba de varios días, me llamó la atención la bonita sonrisa que me dirigió ...