Alicia y Cristina - Relatos Eróticos

Alicia y Cristina

... cuerpo desnudo con su pequeña mano tomó mi pene y lo llevó a su pequeña y hermosa boca. Desapareció más allá de sus labios rojos bastante pequeños en su boca abierta. Su boca se cerró sobre el. Cerca de dos pulgadas de mi pene estaban dentro de su boca. Ella empezó a chuparlo. ‐ ¡Oh Dios! Esto es divino. Mi pene sintió sus labios suaves pequeños, mientras su lengua húmeda suave alrededor de la cabeza de mi polla palpitante caliente. Su pequeña lengua estaba enroscada alrededor del eje de mi pene. Sus labios se llevan a cabo en un beso. De alguna manera, ella abrió la boca aún más y se deslizó aún más mi polla dura en su desenfrenada boca pequeña de ocho años de edad. Al final mi verga empujó contra su boca, tratando de pasar por su garganta. Es todo lo que podía hacer para evitar el acaparamiento de la cabeza y empujando mi polla en su pequeña boca hasta la empuñadura, lo que obliga al final del mismo fondo de su garganta. Sus labios estaban en la base de mi polla y toda la longitud de la misma estaba dentro de su boca y la garganta. Vi esta diosa niña desnuda con el pecho y los pezones duros pequeños perfectos, hermoso culo redondo y mi verga metida por completo en su boca, la vista era hermosa. Mi pene estaba pegando a su tierna boca pequeña. Ella lo chupó, los pensamientos de forzar mi pene en su garganta se desvanecieron en la emoción y la belleza del momento. Sus pequeños labios y la lengua acariciaron mi pene de una manera que me enviaron en el olvido. Movía su lengua ...

... alrededor de mi glande para después chuparlo con esmero y devoción, movía su cabeza de arriba abajo, en ese momento ni quería preguntar quién le enseñó Mis manos se estiraron y tocaron su cuerpo. Una mano le acarició los pezones se deslizó entre sus piernas abiertas acariciando sus nalgas antes de encontrar su dulce coño húmedo. Su pequeña lengua se movió suavemente pero con firmeza todo mi pene. Las sensaciones mientras chupaba y acaricio con el interior de su boca mi pene eran simplemente increíbles. Las imágenes y las sensaciones eran cada vez más y más fuerte. Mi pene comenzó a latir, apretando en la etapa final antes de un clímax gigante. Luego, entonces, ‐ Oh, mierda! Me vine disparando mi semen entero en la boca de la pequeña Alicia. Mis manos acariciaban sus pequeños pezones apretándolos entre el índice y el pulgar. Dos dedos se deslizaron profundamente en su raja sin pelo. Podía sentir el chorro de esperma, que se disparó desde mi polla hasta su boca pequeña y preciosa. Una y otra vez mi gran verga latía y se contrajo, ella seguía chupando lo que quedaba por salir de semen. El placer era increíble. Mi pene se sentía cada mordida y chupada de su pequeña boca y la lengua, mientras chupaba el semen desde el final de mi polla palpitante, tragaba y chupaba de nuevo, una y otra vez. Su cabeza se dio la vuelta lo suficiente para mí ver que estaba obviamente disfrutando al darme tanto placer como yo le di al chupar su pequeña rajita. Ella abrió la boca. Pude ver a mi blanco ...