Alicia y Cristina
Fecha: 03/03/2018,
Categorías:
Hetero
Autor: adalberto1979, Fuente: SexoSinTabues
... cama y logrando pararme. Ella abrió la boca cuando mi polla se movió dentro de ella. Parecía, si eso fuera posible, que iba incluso más profundamente en su apretado coño dulce. La llevé, con mi polla dentro de ella, hasta el espejo. Tenía que ver este espectáculo. ‐ ¡Oh Dios mío! Mira eso. El espejo se reveló una vista aún más espectacular de lo que había imaginado. Hubo diminuto cuerpo de Alice en mis brazos. Sus brazos y piernas delgadas envueltas alrededor de mí. Sólo la base de mi pene era visible. El resto de ella sobresalía entre sus labios vaginales en su conchita. Su cuerpo parecía tan pequeño y delicado junto a la mío, menos de la mitad de mi tamaño. Su pequeño culo redondo estaba en mis manos mientras la abrazaba fuertemente contra mi cuerpo. Se movía por ahora, por lo que el interior de su vagina masajeaba mi pene. Había dejado de llorar, pero todavía era considerablemente más tierna ‐ Llévame de vuelta a la cama y fóllame mi coño ahí ahora—susurró en mi oído-- o ¿quieres que me menee aquí alrededor de su pene, delante del espejo? Eso sonaba bien también, pero la lleve de vuelta a la cama. Con un gran control poco a poco la baje sobre su espalda para que su vagina quedara en el borde de la cama y pudiera inclinarme sobre ella en el borde con una vista sin obstáculos de su cuerpo y de mi pene entrando y saliendo de su conchita virgen. La vista de su pequeño cuerpo tendido acostado en la cama, su coño empalado en mi gran polla y sus pequeños pezones hinchados, sólo ...
... fue superada por los sentimientos maravillosos en mi pene mientras bombeaba dentro y fuera de ese pequeño cuerpo. Lo vi desaparecer en el pequeño cuerpo de Alicia, a continuación, vuelve a aparecer, húmedo y brillante con sus tintes rojos jugosos del coño. Una y otra vez mi pene seguía coger su magnífica pequeño coño, deslizándose dentro y fuera de ese gatito bebé, la construcción de pasiones en mí más allá de toda razón. Reduje la velocidad, para que dure el mayor tiempo posible. Me deje caer sobre su pequeño cuerpo. No moví mi pene, saboreando la cercanía de su pequeña vagina, que rodea y sostiene mi pene, disfrutó el contacto de su piel suave contra la mía. Mi pene suavemente exploró las profundidades de la vagina de Alicia, sintiendo exquisitos estimulaciones en cada movimiento, mientras me movía hacia fuera y después profundamente de nuevo en la puta idiota y delicada Alicia. Ella sonrió maliciosamente como tomando el control real de ella y comenzó a mover su cuerpo alrededor y manipular sus músculos de la pelvis contra mi verga. Alicia vio la pasión en mi cara mientras se manipula sus músculos pélvicos para alcanzar el más alto nivel de estimulación de mi pene. ‐ Oh, mierda! ¿Qué me estás haciendo?-- Mi pene comenzó a palpitar. ‐ Oh, mierda!—contesto ella sin dejar de mover su pelvis Mi verga se tensó de nuevo. Se Iba a venir otra vez, pero esta vez en el pequeño gatito virginal de Alicia. ‐ Oh, mierda! Mi pene endurecido una vez más, disparó leche caliente en el coño de ...