Los albañiles de la bodega me desgarraron el culo
Fecha: 13/10/2023,
Categorías:
Sexo en Grupo
Tus Relatos
Autor: Alexandra Love, Fuente: RelatosEroticos-Gratis
... y adolorida, yo quería sentir placer en todo mi cuerpo así que me toqué los senos, estimulé y pellizqué mis pezones, y al sentirme muy cachonda, con el plug anal que aun traía en mi mano me penetré la vagina para sentirme totalmente cogida, así que lo dejé puesto.
—¡Ya mi amor rómpeme el culo!
Apenas le dije eso, sentí como empujo el bate con su peso, y mi ano se abrió tanto que pude sentir una fuerte punzada, un desgarro y ardor mayor a lo que antes había experimentado, sentí como el bate entro hasta el fondo y topo en mi interior, hasta el vehículo se movió en ese instante grité, y comencé a llorar teniendo el bate dentro, y el hombre dijo ya estás bien abierta mi amor era lo que me pediste, entonces sentí que me lo iba a sacar y le hice una señal con mis manos temblorosas, para que no lo moviera, porque no podía hablar del dolor. Me sentía una escuincla ahogada en su propio llanto.
—Déjamelo adentro, no lo saques. —Le dijo llorando entrecortadamente.
—¿Te gusta mamacita?
—Sí, me duelo mucho, pero sí me gusta. A ver, comienza a cogerme con el bate suavemente.
Él comenzó a cogerme con el bate suavemente, lo hacía muy profundamente.
—A ver sáquenmelo y díganme como se me ve el ano.
—Estas sangrando mamacita. —Me dijo mi chofer.
—Se te ve bien abierto. Me dijo el amigo de mi chofer.
—Ábranme las nalgas y comiencen a cogerme de nuevo con el bate, pero sacándolo por completo y metiéndolo a fondo varias veces.
—Se ve que te gusta arto sentirte cogida. —Me dijo el ...
... chofer mientras metia el bate por mi ano.
—¡Aaayyy! ¡Aahhh! ¡Me duele mucho! ¡Aaahh! ¡Aaahh! ¡Sí! ¡Aaahh! —Yo me sentía muy lastimada y cogida, fue hermoso. Mi masoquismo estaba siendo satisfecho. Mi ninfomanía se avivaba.
Me cogieron a si durante una media hora y yo quede sobre el cofre rendida y gozando de ser cogida analmente con ese bate tan grueso.
Al sentir mi culo tan abierto y sensible, la excitación que sentía era desbordante, estaba tan alcoholizada, desinhibida, cachonda y llena de morbosidad por violentar mi cuerpo que le pedí al amigo de mi chofer que dejara el bate y me penetrara con su puño cerrado. El taxista se humedeció la mano con mis fluidos y cerró su puño para comenzar a empujarlo contra mi ano, sentía como mi esfínter anal trataba de abrirse para recibir ese puño, yo trate de relajarme, pero estaba muy nerviosa mis piernas temblaban y el abdomen se me contraía del miedo. Le pedí que lo hiciera con más fuerza y su puño comenzó a entrar en mi culo. Yo sentía como se me desgarraba el esfínter, era deliciosamente doloroso, mis gemidos se ahogaban con mi llanto.
—¡Aaayyy! ¡Aahhh! ¡Ah! ¡Mmm! ¡Ahh! ¡Sí! ¡Aaahh! ¡Aaaauuu! ¡Ahhh! ¡Ah!
—¿Así te gusta?
—¡Ya lo métemela por completo!
Entonces el taxista empujo con fuerza, sentí como si me hubiera golpeado con el puño cerrado en mi culo, su puño entro completamente, sentí como mi culo estaba completamente roto, el reloj metálico que el hombre tenía en su muñeca, me raspo el ano, así que el taxista saco su puño y ...