1. Nombre de ángel: Matías


    Fecha: 19/09/2017, Categorías: Erotismo y Amor Hetero Autor: Mewlen, Fuente: CuentoRelatos

    ... en general, había rehuido el contacto físico conmigo... no, no era que huyera cuando la saludaba o algo por el estilo, pero era notorio que no estaba cómoda cuando había una distancia muy reducida entre nosotros o con Miguel o Samuel. A contar de aquella mañana, sin embargo, noté claramente como la distancia física entre nosotros se iba reduciendo; incluso con otros hombres dejaba de estar tan a la defensiva, al menos cuando yo estaba con ella. Noté también con el correr de los días que comenzó a dormir mejor y que las ojeras desaparecieron de su rostro. ... Lo peor para mí fue que me acostumbré a que fuera su rostro lo primero que veía cada mañana. Pasaron las semanas y mis despertares empezaron a ser cada vez más difíciles. Al principio apenas si buscaba mi contacto durante la noche; luego se fue haciendo cada vez más frecuente el despertar junto a ella, hasta que llegó el día en que desperté con su cabeza sobre mi pecho. El día anterior había sido un mal día. Un proyecto en el que habíamos invertido bastante tiempo y recursos fue rechazado y quedamos sin la segunda parte del pago por el mismo. Realmente estaba preocupado de pensar en cómo reunir el dinero necesario para seguir funcionando ese mes y no había descansado realmente, sin embargo, la rutina de despertar temprano estaba tan embebida en mí que de todas formas abrí los ojos hacia las 6 y media de la mañana. Ya había luz y pude ver el pacífico rostro de Susana. No sé realmente cuanto tiempo la estuve mirando, ...
    ... pero medio dormida y medio despierta me miró a los ojos y me dijo. - Anda, quita ese ceño fruncido, Matías... Dijo eso y luego me besó en la mejilla y volvió a dormirse, aún sobre mi pecho. Juro que, hasta ese preciso momento, jamás se me había cruzado por la cabeza el verla como mujer. Aparté su pelo para verla mejor y fue como si la viera por vez primera. Sus labios y mejillas habían ganado en tono y volumen y su pelo ondulado tenía ahora un aspecto que mostraba bienestar. Unas pocas pecas sobre su nariz y mejillas le daban un toque especial de inocencia a su semblante que, uniéndolo con el valor que trasuntaba su rostro, me daban la impresión de una flor que comenzaba a mostrarse en todo su esplendor. Mi di cuenta que tenían entre mis brazos a una verdadera belleza, no sólo de cuerpo; la chiquilla asustada de unos meses atrás rápidamente dejaba paso a una mujer joven y decidida. La tranquilidad reflejada en su faz era algo que tampoco había visto hasta ahora. El ritmo de su respiración sobre mí se me antojaba extrañamente seductor y, por primera vez, tuve que esforzarme conscientemente por no atraerla hacia mí y abrazarla con anhelo. ... En mi mente aquel gatito había dejado de maullar y ahora rugía como león. Cuando, un mes más tarde, Cristina averiguó acerca de nuestro nuevo arreglo, puso el grito en el cielo, llegando incluso a amenazar con acusarme ante las autoridades. Me encantó la defensa que Susana hizo acerca de mí, echándole en cara que yo era el único hombre que ...
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