Para que tengas un buen motivo para odiarme 2 - Relatos Eróticos

Para que tengas un buen motivo para odiarme 2

... taladrando eran lo mejor, "Me encanta, me encanta, me encanta" la amenacé "Sólo yo te puedo tener así, de ahora en adelante me perteneces ¿Entendiste?" Ella gemía y gritaba pero no me contestaba, le di una nalgada tan fuerte que le dejé mi mano marcada ella giró para verme a los ojos y contesto "Sí Alex, te pertenezco, sólo tú me vas a tener" me estiré para jalarla del cabello y de un brazo, la sujetaba firme pero sin lastimarla, la quería así, viéndome como la cogía y le daba duro, que no pensara en nadie más que en mí poseyendo su delicioso cuerpo. Aumento el ritmo y fuerzas de las embestidas le repetía "Eres mía, eres mía, mía", ella decía que sí entre gemidos. Por unos segundos la solté del brazo sin dejar de penetrarla, escuchaba como fuertemente sus enormes nalgas chocaban conmigo, mi brazo libre lo usé para tomar el pequeño control de la cama, lo encendí y ambras sentimos como el dildo empezó a vibrar fuerte, ella gritó sorprendida y se intentó quitar, la tomé fuerte de sus caderas y seguí con el fuerte mete saca, riendo le advertí "De aquí no te vas, preciosa, aún nos falta mucho" entre gemidos y puchero me dijo "me asustó tu monstruo con esas vibraciones"  me reí y le dije "mi pequeña inocente" ella me levantó una ceja viéndome fijamente me soltó "No soy inocente, recuerda al chico que me tuvo y al que se la chupé". La cabrona me hacía enfurecer a propósito, le saqué el dildo, le jalé una pierna haciendo la girar, la jalé de un brazo y la hice hincarse, la tomé del ...

... cabello y le metí el dildo en la boca mientras la hacía mamarlo le dije "Cuidado con lo que dices, pequeña, mientras pruebas el sabor de tu coño quiero que medites muy bien, ¿Qué te gusta más, estar con esos idiotas o que yo te haga mía?" Le follé la boca algo brusco porque estaba molesta, se la enterré hasta la garganta, la dejé así unos segundos, verla tan vulnerable me hizo sentir poderosa, eso bajo un poco mi enojo, se la saqué de la boca, ella tocia y respiraba agitadamente, le daba golpecitos y cachetadas leves con el dildo, di un paso atrás, sólo para volver levantarla jalandola del brazo y empujarla sobre la cama, abrí sus piernas, escupí en su coño, le meti los dedos en la boca buscando saliva, la exparsí en el dildo lo apunté a su coño y lo introduje completamente de un empujón, Fer gritó y como comencé a penetrarla fuerte puso su manita en mi estómago como para alejarme un poco y no lo metiera completo, viéndome algo asustada, seguía molesta por como hizo provocarme, quite su mano jalandola de la muñeca para usarla de agarre y cogerla más fuerte, gemía y gemía, le advertí "No me vuelvas a decir nada como eso, jamás" me sonrió provocativa y me retó "¿O si no, quéee?" Esta nena no sabe a quién esta molestando, pensé, me levanté para poner sus piernas en mis hombros y la penetré violentamente, bombeando duro y bestial, lo más fuerte y rápido que podía. Fer gritaba y gemía muy fuerte, con sus manitas intentaba empujarme diciendo algo desesperada "Espera, Alex, espera, ...