Incesto luego de que me doparan con un afrodisíaco
Fecha: 13/03/2024,
Categorías:
Incesto
Autor: Quique, Fuente: TodoRelatos
... había ido muy rápido a mirar debajo del asiento por si se le había caído en su sillón.
-¿Y si estaba sin batería cómo has sabido que nos grabó?
-Yendo al servicio pude oír nuestras voces. Ten cuidado con mi padre, es muy cabrón.
-¿Crees que se lo dirá a tu hermano?
-Creo que va a ir a por ti.. Tengo que colgar. Oigo sus pasos en el pasillo.
María colgó y yo quedé preocupada por lo que mi suegro podría hacer.
Una hora y pico más tarde. Me desperté con una mano tapándome la boca. Se encendió la luz. Era mi suegro quien me estaba tapando la boca.
-Así que te gusta comer coños.
Me quitó la mano de la boca y me senté en la cama.
-¡Fuera de mi casa, pervertido!
-No me voy a ir, vengo a follarte como a ti te gusta que te follen.
-Contigo me daría asco.
-Dentro de un rato ya no pensarás así.
Al otro lado de la cama vi a un muchacho guapísimo, alto, delgado, rubio, de ojos azules, sus labios eran carnosos y sus manos eran grandes como palas, era demasiado lindo para ser heterosexual. Seguro que mi suegro y él se entendían.
-¿Y ese maricón que hace aquí?
Me contestó el rubio, que tenía acento francés.
-He venido a participar.
-¿No os llega daros por el culo uno al otro?
Al mirar de nuevo a mi suegro, me echó en la boca parte del contenido de un pequeño frasco, y después me volvió a tapar la boca. No me quedó más remedio que tragar. Cuando me quitó la mano de la boca, le pregunté:
-¿Qué me has dado, desgraciado?
-Algo que ...
... hemos inventado Pierre y yo.
Mi suegro era profesor en una facultad de química. Imaginé que lo que me había dado, y que sabía a menta, era para dormirme, pero no era así. Comencé a sentir calor en todo el cuerpo y el coño me empezó a picar como si mi suegro y el rubio me hubieran estado calentando durante horas.
-Ya te debió hacer efecto la pócima.
Lo negué a palo seco.
-No siento nada.
-Sé que mientes, pero no me importa, tú no te muevas de donde estás.
-¡¿Y si me muevo, qué?!
-No quieras descubrirlo.
No quise descubrirlo. Mi suegro, que había venido trajeado, se quitó la chaqueta, el chaleco y la corbata, y luego la camisa. Después de bajarse los pantalones y los calzoncillos y de ver su cuerpo musculado y su gorda polla, sentí aún más calor y comencé a sudar. Cuando miré para el rubio ya estaba en pelotas, tenía un cuerpo como el del David de Miguel Ángel, hasta la polla tenía un aire, vale que era más larga, pero era delgada.
Sudaba como una cerda cuando se metieron los dos en la cama y se echaron a mi lado. El rubio le dijo a mi suegro:
-Tiene un cuerpo maravilloso.
-Sí, Pierre, tiene un cuerpo maravilloso, que vamos a disfrutar esta noche.
Leandro me lamió el cuello sudado. Pierre me besó. Separé un poco los labios para que su lengua entrase en mi boca y acariciase la mía, pero no le devolví el beso, aunque me moría por comérmelo vivo. Luego mi suegro me agarró la teta izquierda, y Pierre la derecha. Magreándolas, lamieron y chuparon los ...