Esther: despedida de soltera en familia (10) - Relatos Eróticos

Esther: despedida de soltera en familia (10)

... ver cómo se marchaban Martha y Julia en el otro vehículo.

No sé cómo explicar la actitud de mi madre una vez que subimos al carro, por varias horas había pensado que cuando al fin estuviéramos lejos de Martha y Julia, me golpearía a placer y haría todo lo que fuera necesario para dejarme claro que era mi dueña y que debería hacer lo que ella quisiera; sin embargo, contrario a mi expectativa, ella y Celia se mantuvieron en silencio durante todo el camino a casa, a pesar de que estaban rabiando de coraje y de que hacían que el ambiente del auto estuviera cargado de una tensión tan intensa que podría haberse cortado en el aire, algo que no cambió incluso después de que llegamos a casa hasta que varias horas más tarde, tras haber desempacado mi equipaje y justo cuando me encontraba rememorando los instantes que compartí con Rodrigo durante la última noche, mamá y Celia entraron en mi alcoba, cerrando tras ellas la puerta, mirándome con severidad mientras yo me sentaba en la cama, recargando mi espalda en la cabecera de madera, sintiendo cómo el miedo se apoderaba poco a poco de mi cuerpo.

- Solo te lo voy a preguntar una vez, si me mientes lo voy a saber cuando el doctor venga a revisarte y tal vez termine matándote a golpes, esta va a ser la única oportunidad que tengas para ser honesta, no la desperdicies - dijo mi madre en un tono tranquilo, pero que a la vez resultaba tan amenazante que me hizo erizar la piel y provocó que un intenso dolor creciera a una velocidad ...

... increíble en la boca de mi estómago - ¿Aún eres virgen? - preguntó mi madre mientras ambas me miraban fijamente a los ojos, sin que encontraran una pronta respuesta de mi parte, provocando que bajara la cabeza, víctima del miedo que me ocasionaba contestar con la verdad a esa pregunta.

- Si hiciste algo con ese chico, es importante que nos lo digas ahora - intervino Celia, de una forma inusualmente tranquila, con una voz que incluso sonaba maternal - si lo confiesas en este momento, podemos hacer algunos arreglos, idear algún plan para que nadie se entere y la boda se pueda llevar a cabo sin contratiempos - Celia dejó de hablar por un momento, mientras se desplazaba y se sentaba en la cama, frente a mí, para luego tomar mi barbilla con suavidad y obligarme a mirarla, haciendo que temblara de miedo en cuanto encontré aquel brillo enloquecido en sus ojos - pero si no nos dices nada y el día del examen médico nos enteramos que te cogiste a ese pendejo, no va a haber un solo hueso que te quede entero después de lo que te vamos a hacer, si no nos dices nada y resulta que en realidad perdiste tu virginidad antes de tiempo, vamos a dedicar el resto de nuestras vidas a hacerte sentir mucho dolor, vamos a sacar de tu cuerpo todo el dinero que no podamos sacar de la familia de Martha, te vamos a rentar con un hombre tras otro para que te usen como la puta que eres a cambio de algunos billetes, de la misma forma como lo hemos hecho con tu hermana durante todos estos años ¿Te queda claro? ...