Noche de tormenta 2 - Relatos Eróticos

Noche de tormenta 2

... mi niño. Mira que putica más linda te traje. Le dije que tú nunca habías estado con una mujer y vino para ser la primera. ¿Qué te parece?

David solo asintió con la cabeza sin dejar a un lado su rostro confuso y volvió a quedar inmóvil mirándome. Yo solté su verga, le acaricié el rostro y lo besé en los labios. -Recuéstate otra vez- Le murmuré al oído y él me obedeció. Yo me subí a la cama y me senté en su cara con mi vagina justo en su boca.

-Ahí tienes, mi amor, Saborea por primera vez a una mujer- le dije y comencé a frotarme contra él.-Así.... ahhhh... Siente lo rica que es mi vagina. Pásame la lengua y mira como me mojo todita. Ahhh....

El joven dio unos lengüetazos tímidos al principio hasta que fue tomando confianza, entonces me agarró por las nalgas y se aferró a mí con fuerza para beberme toda como un loco.

-Ahhh... mi amor, qué rico. Qué bien lo haces. Así es como vuelves loca a una mujer. Ahhh... Primero te comes bien rico su vagina, y después le metes la vergota grande esa tuya. Ahhh.... Asíiiii... Ahhhh...

David alternaba sus lengüetazos con chupones a mi clítoris como si fuera un verdadero experto. Metía su lengua bien adentro. me apretaba las nalgas y gruñía como una bestia adolorida para que no le quitaran su comida. Se estaba dando un banquete con mi vagina y yo con su lengua.

-Sí, mi amor, chúpala toda Ahhh.... Chúpala toda que me quiero venir en tu boca. Ahhh... Si.... Chupa... -Comenzó a darme nalgadas- Sí.... dame duro... dame duro en ...

... el culo con las manos y duro en la vagina con tu lengua. sí... Asíiii duro... duro ¡Ayyyyyy ...!

Mi orgasmo llegó como una avalancha, y un potente chorro salió desde mi entrepierna para bañar toda la cara de David como premio por tan rica mamada. Yo cerré los ojos y disfruté de cada una de mis contracciones mientras me restregaba cada vez más lento entre su nariz y su boca.

-Ufff niño... eres un dios con esa lengua. -Le dije mientras liberaba su cara para bajar hasta su cintura. -Ahora te voy a cabalgar igual de rico pero con esa vergota adentro.

Agarré su verga con la mano para acomodarla en la entrada de mi vagina y de pronto la expresión de mi amante cambió y me detuvo agarrándome la mano.

.-Tú... me dijo con rostro sombrío- Tú... tienes el demonio adentro.

-¿El demonio? -De qué estás hablando?

-Son sus voces -intervino Ramón- seguramente le están diciendo cosas de ti.

-Sí... tú... tú tienes el demonio dentro. Tú estás poseída- David comenzó a forcejear un poco para quitarme de encima. Yo por mi parte le agarré las manos entrelazando mis dedos con los de él, y traté de calmarlo.

-No, mi amor, no digas eso.. Yo no estoy poseída. Solo tengo muchas ganas de coger contigo.

-No... tú estás poseída. Estás poseída...

.Entonces ven -repliqué moviéndome sobre su verga para ensartarla en mi vagina- Sácame el demonio con eso tan grande que tienes entre las piernas- Diciendo eso me incliné sobre él y lo besé nuevamente. Me acomodé mejor y ¡Zas! capturé su ...