La tormenta perfecta - Relatos Eróticos

La tormenta perfecta

... placer mientras me sopesaba mis pequeñas bolas y buscaba mi picha su lengua me dio placer durante un buen rato para luego tumbarme boca arriba en el sofá y buscar mi polla para comerse la entera.

Sin ninguna dificultad se la pudo introducir entera la boca mientras me succionaba la polla y me acariciaba los huevos oh eran mis huevos los que ocupaban su humedad y caliente boca yo me devolví para deleitarme con su tranca y comerme sus gordas pelotas a medida que se restregaba contra mí por sus movimientos mi lengua llegaba hasta su escroto viendo como su esfínter parecía que sabría como una pequeña boca.

Conseguí que Mikel me diese un poco de tregua y pudiese llegar más allá de su escroto hasta alcanzar su esfínter donde cuando mi lengua empezó a humedecer aquella zona parecía la boca de un pez abriéndose y cerrando mi lengua traspasó el umbral de aquel a sacando jadeos y suspiros a este que flotaba toda su raja contra mi boca y mi nariz.

Unos minutos después volvió a colocarme en el sofá con ninguno al borde para él poniéndose de rodillas y levantando mis piernas una vez puesto el condón y lubricado la zona primero con su lengua y luego con sus dedos untados en un lubricante oloroso hasta que suplique que me la clavase.

Sentí el calor de su capullo pegado a la entrada de mi ano y como poco a poco empezaba a ejercer una pequeña presión para deslizar todo aquello en mis entrañas, sentí como los primeros centímetros traspasaron mi esfínter para retrocediendo dejar un ...

... gran vacío que en décima de en segundos vuelve a estar taponado mi agujero.

Vuelvo a sentir como su polla queda presionando suavemente la entrada de mi ano y como yo abriendo mis nalgas y echándolas para atrás busco su penetración qué se completa de tiro sintiendo como sus pelotas chocan en mis nalgas.

Así empieza a meter y sacar cada vez a más ritmo su tranca mientras menea mi faz de apoyo y suelta pequeñas gotas por la presión en mi próstata durante un buen rato soy follada como la auténtica perra sacando suspiros y jadeos que animan a Mikel.

Este me coloca a cuatro patas y separando mis piernas y mis nalgas me la clava de una sola es tocada hasta que sus bolas chocan con las mías sacándola y metiéndola completamente tres o cuatro veces para luego empezar a follarme sin descanso mientras mi pequeña polla gotea por el placer que me produce la follada.

Siento como Mikel se contrae jadea y respira fuertemente me voy a correr Cacho perra no aguanto más donde quieres la leche, no sé tú sabrás donde quieras me da igual.

Joder ostia me voy a correr me corro y automáticamente su tranca abandona mis entrañas para quitándose el condón y apuntando hacia mi boca deposita toda su leche entre mis labios y mi lengua escapando alguna descarga en mi cara la corrida ha sido abundante llenado mi boca y mi cara de Blanca leche Mikel casi al instante y sin dejarme tragar toda la leche comienza a besarme intercambiando saliva y esperma durante unos minutos para luego limpiar mi ...