Historia 3: De seductora a seducida en un chat - Relatos Eróticos

Historia 3: De seductora a seducida en un chat

... tanto tenerlo frente a mi. Me quité toda mi ropa, los listones de mi bra, se alejaron de mis hombros y dejaron frente a él mis senos al descubierto, mis pezones duros denotaban el grado de excitación que llevaba. Al tiempo que con un movimiento de piernas dejé caer mi diminuta tanguita al piso. Todo esto paso por paso lo íbamos detallando y escribiendo envolviéndonos en un mar de placer y oscuro deseo. No lo podía creer lo que estaba haciendo pero en verdad lo disfrutaba. Él se quitó la camisa y yo besaba su pecho. Ayudé a retirarle su pantalón (no podía esconder la lujuria dentro de mi). A veces sentada a veces de pié, estaba desnuda moviéndome al ritmo de sus palabras. Sentí como si pudiera mirarme, morbosamente cada parte de mi cuerpo. En ese momento me trasladé a mi cama, abriendo de a poco mis piernas mi mente imaginaba como él me besaba desde mis rodillas, mis muslos, subiendo un poco más lentamente hasta llegar a mi sexo para que juegue con su lengua y sus dedos. Su lengua estaba saboreando mi miel, jugando de arriba abajo, su boca era la encargada de darme todo el placer, no pensaba en nada más que disfrutar cada escena. Me tenía muy mojada, me pidió que me ponga de pie y me agachara, diciéndome que podía ver mi majestuoso "culo" y que ahora yo era suya. Un par de azotes que yo misma me encargaba de darme, él me provocaba y hacía que me sienta más y más caliente. Fue en ese momento cuando me tomó de mis caderas, y me dijo "Afrodita serás mía para siempre". Lo sentía ...

... tan real, tan suya, tan dentro de mi. Me penetraba, me acariciaba, estoy segura que él disfrutaba de mi. Seguimos en esa posición hasta que me llevó a mi orgasmo, gemí tan fuerte y se lo dije. El morbo no se había ido, su reina Afrodita quería complacerlo y hacerlo terminar, así que me ofrecí arrodillada frente a él hasta que virtualmente me llene de su leche.

"Estás marcada por mi para el resto de tu vida", esas palabras me encantaron y ahí fue cuando entendí que yo fui la cayó seducida a sus encantos y no quería que esto terminara. Seguimos intercambiando mensajes, no queríamos que esto acabe. Algunas risas, algunos piropos, y más besos. Cuando me di cuenta el reloj de la sala ya daba más de las 6pm y olvidé por completo que una amiga me había invitado al cine:

: Tengo que irme, una amiga me invitó al cine

: No te vayas, esto es especial

: Estoy hecha un desastre y aún no me cambio

: Debes estar hermosa, no te vayas, cómo volveré a saber de ti

: Qué estás pensando?

:correo@algo.com escríbeme si?

: …

: Prométeme que lo harás

: Está bien lo haré

Volví a mi casa bien entrada la noche, aún estaba en una nube, pensando en él, ¿fue real?, Esta conexión no la he sentido jamás, ¿qué me estaba pasando?. -Vamos intenta dormir, pero en mi cabeza únicamente estaban las imágenes de sus besos, de aquel encuentro inesperado, su mirada, de su sonrisa. Intentaba decirme que fue solo un relato.

El despertador sonó y me sentía como nueva, hace muchas noches ...