Sexos revueltos
Fecha: 31/07/2024,
Categorías:
Intercambios
Autor: Cuenta Relatos, Fuente: TodoRelatos
... practicaba gimnasia dejándome ver esa vulva sin pelos y hermosa, por un momento me puse a fantasear y a pensar que Claudia la tendría igual, qué delicia. Sin mucho miramiento, Franco empezó a chupar el clítoris de Daniela, con un deseo como queriendo comerse el botoncito de su vulva. Ella no paraba de gritar, mientras se estrujaba sus hermosos pechitos y pellizcaba sus pezones con dulzura. Mientras observaba esto, yo también me di cuenta de que tenía varios días de no disfrutar de una buena verga... mi esposo me tenía olvidada porque había tenido mi menstruación recientemente, me consolaba con mis vibradores y los amo pero nunca será lo mismo, siempre se extraña la carne cruda, sobre todo una como la de Franco que era grande y gruesa.
Yo estaba como volcán ardiendo mientras observaba la mamada de campeonato que le daban a Daniela. Ya no pude más y así, en cueritos y con el bizcocho sudando pura pasión, entré.
Ellos no se dieron cuenta hasta que metí mi mano debajo del cuerpo de Franco, sintiendo semejante pinga entre mis manos, que estaba dura como poste y con líquido cubriéndole la cabeza...
<<¡Este hombre necesitaba un hoyo con urgencia para descargar!>>, pensé, aunque por lo sorpresivo de mi intervención, él se levantó y se quedaron de una pieza cuando vieron que se trataba de mí...
-Sigan, yo no le voy a decir nada a tu mujer –les dije.
Daniela se volvió a acostar y se abrió el chocho jalando sus labios vaginales hacia los lados y dijo que por ella no ...
... había problema que yo estuviera. Franco se me quedó viendo unos segundos, pero vi que había cierta lujuria de ver a una mujer ajena, amiga de su esposa y desnuda, que también se le ofrecía... Volvió a seguir chupando el clítoris de Daniela y yo metí mi mano para agarrarle su verga...
-¡Ay, sí, sóbamela rico! -dijo levantando la cabeza de la entrepierna de Daniela.
Tal vez por urgencia sexual, o por cansancio de la posición, pero el caso es que aceleró la mamada y con dos dedos penetró la vagina de su cuñada, la cual empezó a bufar como toro enojado, sintiendo el orgasmo que le llenaba el cuerpo, levantó la pelvis como queriendo meterle la vagina en la cara a Franco, mientras gritaba:
-¡Síii..., me vengoooo... mássss... agh! -y luego cayó pesadamente de espaldas cuando su orgasmo acabó.
Franco se levantó, lo que aproveché y poniéndome en posición de perrito, le dije que me parchara. Él me puso la verga en mi cueva y la empujó de un golpe...
-¡Órale pues puta, seguramente tu viejo no te cumple, así que si lo que necesitas es verga, pues verga, eso tendrás... siéntela mamacita, siéntela! -dijo Franco en el colmo del éxtasis al lograr penetrar mi vagina.
La penetración se hizo rápida y fuerte. Tenía los ojos cerrados disfrutando el placer de ser penetrada, así que ni supe qué estaba haciendo Daniela...
-¡Ayyy... puta... me matas... estoy que me vengo... uy, sí, uy sí...! –comenzó a decir él.
-¡Síii, méteme tu pitote hasta el fondo y fórrame de tus mocos mi ...