La mujer perdida II
Fecha: 05/10/2024,
Categorías:
Dominación / BDSM,
Infidelidad
Voyerismo
Autor: oldie, Fuente: SexoSinTabues30
... puerta del baño no estaba cerrada del todo de manera que a hurtadillas me asomé para ver si ella descansaba.
Pero no era así mi mamá estaba sentada en el bidé afeitándose el pubis, yo miraba totalmente hipnotizado la escena. Ella totalmente desnuda y con la maquinilla
rasurándose ese felpudo hasta dejarlo completamente imberbe.
A continuación, se metió dentro de la bañera. Yo sin hacer apenas ruido me salí de nuevo a la calle.
Sabía perfectamente lo que significaba ese acto, y sobre todo las consecuencias que iba a traer.
Las horas pasaban y yo con ellas muy inquieto e impaciente por saber lo que depararía esa tarde en la oficina. Al llegar la hora de costumbre yo me escondí en una esquina de la calle hasta que vi entrar a mi madre en el viejo almacén y a continuación a don Alfonso cerrando “casi” del todo la vieja y sonora persiana metálica.
Esperé un par de minutos y con mucho cuidado, me colé dentro del almacén sin ser visto.
Volvía a recorrer el oscuro pasillo que desprendía un intenso olor a serrín y moho, sin tocar nada por miedo a hacer algún ruido y de ese modo delatar mi presencia.
Extrañamente, en esa ocasión no se oían ruidos ni forcejeos…
Ni gritos, absolutamente nada.
Me acerqué a los vinilos de la oficina y me quedé observando.
don Alfonso estaba sentado en su mesa concentrado en sus papeles y facturas, casi sin prestar atención a mi mamá que se afanaba en recoger las papeleras y barrer el suelo.
Desde mi posición, pude ...
... observar la expresión de contrariedad que tenía mi madre. Imagino que pensaría que el viejo jefe ya había conseguido lo que quería de ella y se había hartado, de modo que ya pasaría de ella.
Justo en ese momento, mi mamá que por cierto llevaba el mismo precioso y nuevo vestido blanco con flores
abotonado por delante de arriba abajo, hizo algo que me dejó helado.
Estando ella de espaldas a la mesa de don Alfonso, (0sea frente a los vinilos desde donde yo podía observarla)
Se desabrocho los tres botones de arriba dejando ver por completo un generoso escote que mostraba más de lo que se adivinaba puesto que se le veía todo el canalillo y bastante cantidad de carne.
Inmediatamente, miró de reojo hacia atrás y al ver que el viejo empresario continuaba en la misma posición, se
desabotonó los tres botones de abajo dejando ver hasta más de la mitad del muslo…
¡Mi madre se comportaba como una auténtica zorra!
¿Dónde había quedado esa esposa abnegada decente y recatada?
La verdad es que no sé dónde había ido a parar, pero esta nueva mujer estaba mucho más viva, era más de color que la antigua ama de casa sumisa y gris y por supuesto muchísimo más interesante.
Algo me sacó de mis pensamientos, ese algo no era otra cosa que el tono burlón que había adoptado don Alfonso
mientras mi madre se había estado desabotonando la parte de abajo.
Era como si él intuyese lo que ella estaba haciendo…
Como si fuese dos pasos antes que ella.
El viejo jefe, volvió a ...