1. Goldfish -1-


    Fecha: 19/10/2024, Categorías: Voyerismo Autor: Mabel, Fuente: TodoRelatos

    ... con la protección. al acabar con la espalda, le bajé un poco la braga sin consultarle untándole con la crema, ¿quieres que te entremeta la braga en el culete? le pregunté, ¡sí! me contestó sin dudar, yo le puse crema en las nalgas intentando meterme lo más posible por debajo de las bragas; pero enseguida se removió inquieta pellizcándose las bragas incómoda, y se dirigió a Celia: ¿te importa si tambien me quito las bragas?, es que así remetidas me molestan.
    
    ¡Clara! le dijo Celia, estoy viendo que no tienes marca de bañador por ninguna parte, que tienes todo el cuerpo igual de moreno, sin marcas, ya me dirás... -la piscina de casa, le contestó, el trampolín lo uso poco pero las hamacas dan mucho juego para todo, ya ves-
    
    Y vamos Mabel, sigue poniéndome la crema que no quiero quemarme. Tiene una firmeza envidiable por todo su cuerpo, con su edad..., debe ser veinte años mayor que yo. Seguí por las piernas hacia arriba, las pantorrillas, los muslos, las nalgas ..., se las abrí y descubrí que como en su día sospeché por su perfil socioeconómico tenía hecho un blanqueamiento anal; es el único que he visto, pero cuando lo ves no queda ninguna duda de que está hecho.
    
    No te va a quedar ni un milímetro sin proteger, le dije, y ya entre las nalgas le metí un dedo, ¡ay perdona!, le dije, ¡no te preocupes, sigue! me contestó, y seguí introduciendole dos dedos, se estremeció abriendo un poco más las piernas, y yo seguí con un masaje por el perineo hasta llegar a la vulva que exploré hasta dar con el punto justo en el que en muy poco tiempo tuvo una convulsión discreta, apenas perceptible para los demás pero profunda según ella misma. Perdoname la vulgaridad de la expresión, me dijo posteriormente, pero me corrí como una gata en celo.
    
    El relato de esta experiencia tiene una segunda parte.
«123»