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La amiga de mi madre nos visita de nuevo
Fecha: 16/11/2024, Categorías: Incesto Autor: Psicoleg, Fuente: TodoRelatos
... camisón y meter las manos debajo de él. ― Que malo eres. Ya te dije que no tenía ganas de nada, que estaba cansada. Pero parece que eso no te va a importar. Yo no le respondí y aparte el escote del camisón para liberar uno de sus enormes pechos y ponerme a lamer con fuerza el pezón. Lamí los dedos de la mano izquierda con abundante saliva y empecé a pasarlos por su clítoris, llegando con la punta a la entrada de su vagina. El movimiento empezó a tener efecto y escuche sus primeros jadeos de placer. ― Me estas calentando mucho. Al final voy a tener ganas de más ― me dijo entre jadeos y apretando mi cabeza sobre su pecho. ― Estoy deseando darte gusto y que tu amiga pueda ver como disfrutas. Me giré hacia atrás y vi como su amiga se estaba masturbando con fuerza. ― ¿Esto es lo que querías ver? ― Me muero de ganas de ver como lo tenéis sexo. Mi madre se levantó de la cama para ir un momento al baño. Cuando volvió yo estaba tumbado y su amiga estaba con todo mi pene dentro de su boca, lamiendo con ganas. ― Venga, ya lo tienes listo para subirte ― le dijo a mi madre. Esta que había dejado su camisón no se hizo de rogar y se puso de rodillas en la cama, colocándose sobre mi con mi ayuda y dejándose caer sentada sobre mi duro pene que entro en ella con gran facilidad. ― Que bárbaro ― dijo su amiga ―. Follando con tu propio hijo. Que suerte que tienes. Yo agarraba a mi madre por su trasero y lo hacia subir y bajar lentamente, sin que ella ...
... tuviera que hacer ningún esfuerzo. Sentía como entraba y salía y como apretaba con sus músculos mi duro pene en su interior para que no escapara. ― ¿Te gusta la dura polla de tu hijo dentro verdad? ― le dije para calentarla más ―. Te voy a dar mucho placer y voy a llenarte de mi lechita caliente. Solo para mi mama querida. Ella apenas respondió con un entrecortado “Siria” mientras se dejaba llevar por mis movimientos de manos y cadera para entrar y salir lo más posible. Sus pechos botaban frente a mí, esos pechos grandes y caídos que tanto me gustaban. Sus ojos cerrados para centrarse en las sensaciones y su lengua saliendo un poco entre sus labios. Su amiga a nuestro lado se seguía masturbando con furia, tocándose los pechos con una de sus manos y dando fuertes gemido. En esos momentos no era consciente, pero más adelante descubriría que la vecina de arriba nos escuchaba en ese momento, y de hecho muchas otras mañanas, descubriendo nuestro secreto. Escuche a la amiga de mi madre que llegaba a un tremendo orgasmo y girándome hacia ella la bese en un estupendo morreo. Entonces sujete la mano de mi madre y la acerque a la vagina de su amiga para que la acariciara, cosa que hizo sin reparos para placer de su amiga que casi tiene un nuevo orgasmo con ese contacto. Entonces le hice un gesto para que se pusiera de rodillas junto a nosotros y agarrara uno de los pechos que mi madre, que empezó a lamer con fuerza, mientras mi madre seguía sobre mi disfrutando de mi lenta ...