Historias de cuarentena. Mi primer bukakke
Fecha: 20/11/2024,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: Eric Salazar, Fuente: TodoRelatos
... fotos de la pareja que me había contactado.
Eran las doce y treinta en punto cuando toque el timbre del portero de la dirección que había recibido. Me abrieron sin preguntar. Era el segundo piso y subí por las escaleras. Al llegar al rellano busqué la letra del piso correspondiente y al llegar comprobé que la puerta estaba entreabierta. Empujé y entré adentro. Me recibió la chica de la pareja, llevaba puesto un camisón transparente a través del cual dejaba entrever un conjunto de lencería que hacía que el voluptuoso cuerpo de esa mujer luciera todavía más apetecible, solo podía verle sus enormes ojos negros, ya que la mascarilla le tapaba toda la cara.
—Hola.— Susurré al oído de la chica.
—Hola.— Me respondió en voz baja—. Puedes pasar y sentarte ahí.
Me cogió de la mano y me llevó hasta un sillón en el cual me senté. Había otros tres chicos en el salón del piso. Estaban de pie y al parecer todavía faltaba más gente por llegar.
Alguno de los chicos tenía el pantalón abierto y las miradas eran de expectación, por lo que deduje que debía de ser su primera vez en eventos de este tipo.
Laura, que era el nombre de la anfitriona, no tardó en venir al sofá a sentarse conmigo, nada más hacerlo me desabrocho el pantalón y metió la mano para sopesar mis atributos.
—Tienes buena polla, me gusta.—Me dijo muy cerca del oído.
Su mirada llena de morbo y lujuria, eran un indicativo inequívoco del nivel de exigencia de esa hembra.
Lejos de intimidarme, me llenó de ...
... ganas de satisfacer a esa mujer.
No había pasado ni diez minutos cuando llegó un quinto chico, que ya era conocido de ella y que más tarde me enteraría de que ya había interactuado con ella más de una vez. Poco después, llegó el sexto y último componente del bukakke. Nada más llegar, dejó claro para los que no lo conocíamos, que era la pareja de la chica.
Se bajó la mascarilla y la besó en la boca, mientras le sujetaba del culo. Fue a la cocina y se abrió una cerveza.
Uno de los chicos se fue, ya que debido al cambio de horario no podía quedarse más rato y despidiéndose de todos, emplazó a la pareja para que le llamase en otra ocasión. La chica le acompañó a la puerta y cuando se dio la vuelta y volvió al salón, su pareja nos dijo:
—Ahora es toda vuestra. Haced con ella lo que queráis.— Y después de decir esto. La cogió de la mano y la llevó a una habitación. Se sentó en una silla y nos dejó a los cuatro restantes rodeando a su chica. Que ya se había despojado de la bata y se había puesto de rodillas en el centro del corro.
Me quité los pantalones y las zapatillas, mientras tanto, el otro chico que los conocía, hizo lo mismo que yo. Mientras, otro de los chicos, se quedó en el salón y se fue. El otro solamente se desabrochó el vaquero y se lo bajó un poco. La chica fue alternando entre nuestros rabos, probando y dando placer a todas las pollas que la rodeaban.
Mi polla estaba dura como una piedra. La situación me tenía tremendamente excitado, hasta la semana ...