El Vigilante de la Privada 9
Fecha: 11/12/2024,
Categorías:
Fantasías Eróticas
Intercambios
Lesbianas
Autor: Lobo85, Fuente: SexoSinTabues30
... orgasmos antes de penetrarla, para que ella misma perdiera la razón, iba a cogérsela con fuerza, sabía que a su pequeña putita le gustaba, aunque con gusto vería llegar caliente, quizás en un capricho decidió no correrse por sus dedos, quería su verga dentro, así que apenas se tocó, eso alentó a Matt, sabiendo sus mañas sexuales, empezando sus toques entre ligeros gemidos. Luego de ello quizás habría querido marcharse, la conocía bien pero antes de que pudiera reaccionar, Matt la estaba sometiendo en su cama, para dejarla solo con sus calcetas, en un manoseo cadencioso le fue quitando todo, para dejarla casi como había nacido, y al verla así, comenzó a saborear su cueva de placer, haciendo un trabajo bucal que alargaría por al menos 10 minutos, en los cuales apenas pudo contenerse la chica, quien miraba como le metían la lengua con una entrega total.
El tiempo se perdería entre esos juegos sensuales, caricias, o lamidas, besos perversos, que iban saboreando cada centímetro, dándole mordidas ligeras a las tetillas, logrando que esta se perdiera en una oleada de sensualidad que le encantaba, pues se sentía más mujercita que muchas de sus amigas, le encantaba saberse deseada, entregada al deseo, a la pasión de un macho, gimiendo un poco mientras era tocada de tal forma que su cuerpo ardía por un valor que la invadía hasta su ultima célula, llegando a su segundo orgasmo, mientras unos leves gemidos y su aroma de hembra en celo llenaban el cuarto, era lo único en su mente, lo ...
... cual despertó su total lujuria, le encantaba eso, estaba ahogada en la pasión.
Tan pérdida en esas penetraciones, que no sintió cuando la puerta se abrió dejando entrar a la novia formal, Carmela desataba la el deseo con solo caminar, y entraba para ver con gusto como su novio hacia suya a una muñequita sexual, que estaba perdiendo la cabeza, mientras quedaba expuesta para un tercero, se quedaba asustada, sin saber que hacer o decir, quería correr asustada, pero no podía, y en ese momentos se desvestía ante sus ojos, dejando ver un cuerpo demasiado sensual. Casi como un juego, uno inesperado, Matt se reacomodaba, dejándole cabalgar, algo que jamás había hecho, pero le gustaba, dejarse caer en esa verga, sintiendo como ella podía controlar las penetraciones, era delicioso, le estaba gustando demasiado, jamás se sintió así, era demasiado adictivo, querían seguir abriendo su utero por voluntad propia, pero súbitamente sentiría unas manos detrás de ella, debido al cambio olvidó a Carmela, fue muy tonta, dejando que la novia formal alcanzara sus pechos y labios, robándole algunos besos, con un tacto tan romántico que apenas se resistió.
Mm, que tenemos aquí, una pequeña roba-novios, creo que te tendré que dar una lección – decía finalmente Carmela mientras se unía a la acción.
Espere, yo – decía asustada Bella, queriendo escapar, pero antes que pudiera decir o hacer nada, las manos de la mujer alcanzaban su punto íntimo para empezar a jugar con su vulva, logrando desatar ...