Vacaiones de verano - Relatos Eróticos

Vacaiones de verano

... cesar, ya me hacía una idea de lo que puede ser por estar familiarizada con el sonido de como algo sale y entra de mi propio cuerpo.

Me asomé un poco más intentando hacer el menor ruido posible para terminar de abrir la puerta lo suficiente y poder ver mejor qué estaba pasando. Solo ver me produjo una reacción que me dejó helada pero chorreo un poco mi entrepierna al ver. Mi tia estaba con las piernas abiertas en la tapa del inodoro entrando y sacando un gran consolador muy grueso, jamás pensé que algo asi de grande y grueso podría entrar y salir de un cuerpo además de el sonido que hacía, el color rosado tenia ciertas cosas blancas viscosas que salían dándome a entender que mi tia llevaba rato en esa acción de entrarlo y sacarlo y ya se había venido varias veces. Dios, llevé mi mano a mi entrepierna al ver como mi tia, con una de sus monumentales piernas dentro de la bañera y la otra al lado de el inodoro usaba una mano para pellizcarse un pezón y la otra para entrar y sacar más y más ese consolador rosado tan grande. Llegó a un punto de entrar y sacarlo, después de casi 3 minutos los cuales parecían eternos, que tocó un botón y comenzó a salir mucho líquido blanco de el mismo, tanto que la mayoría cayó en el piso, lo entró lo más que pudo en ella y vi como su cara se ponía roja y sus ojos en blanco, había llegado a otro orgasmo al parecer. En un momento, perdí equilibrio y otra vez, pendeja al fin, caí adelante abriendo la puerta de golpe. Mi tia del susto solto el ...

... consolador y vi todo su tamaño, era mas grande que mi propio antebrazo y mas grueso que mi propio puño, cómo es que le cabia tanto en su vagina, la cual estaba escurriendo chorros y chorros del líquido parecido al semen. No se podía ni levantar de la tapa del inodoro pero entre jadeos me miro y me dijo:

-Siempre estás observando? -se sentía el enojo en su tono de voz.

-No tia perdón... -me puse de rodillas frente a ella con ambos puños en mis rodillas.

-Espero que esto se quede entre nosotras -se sento bien con las piernas un poco abiertas, el líquido aún escurriendo de su vagina.

-No se lo diré a nadie tia... lo juro...

-Qué tanto llevabas afuera viendo? -me quedé en silencio mirando al suelo- responde te dije.

-No mucho, solo iba a bañarme pero como estabas ocupada no quise interrumpirte.

-Bueno, al final lo hiciste -intentó pararse pero no pudo, no tenía fuerzas en sus piernas.

Yo estaba perdida en su cuerpo, semejante diosa tenia de tia, estaba un poco llenita por el tiempo pero sus piernas estaban tan bien formadas por las actividades del campo y sus pechos mas grandes que los mios me hacían sentir intimidada, que copa será?...

-Claudia! -me devolvió mi tia de mala manera a la realidad pero aun seguía un poco boba por lo que había pasado ayer y ahora por igual- me ayudarás entonces?

-Como? -no sabia a que se referia y mi corazón latio fuerte por si acaso se referia a con lo que ella empezó- c-con que quieres ayuda?...

-Con lo que te acabo de ...