Pasé de ser homofóbico a versátil (parte 2): Pasivo
Fecha: 08/01/2025,
Categorías:
Transexuales
Autor: versatilidad, Fuente: CuentoRelatos
... sentía entrar a mis entrañas todo ese fierro, hasta que me lo metía más rápido mientras mis gemidos y los suyos se combinaban, el ardor y el dolor se iban mientras ella me besaba y me decía lo rico que se sentía mi culo.
Me puso en cuatro, me metió toda esa vergota en mi ano, me daba de nalgadas mientras que me decía que yo era su perra, yo era su mujer ahora, las nalgadas me dolían pero era un dolor que me gustaba, mis dos nalgas se hicieron rojas, mientras que ella empujaba una y otra vez, me jaló el pelo y me obligó a decirle que soy su mujer, su perra, su zorra a lo que no me negué me sentí una mujer por primera vez, me sentí deseado, me sentí bien, el dolor se iba convirtiendo en placer, hasta que le pedía más y más, su verga tocaba un punto dentro de mí, que hizo que me venga en las sábanas.
Caí rendido, pero eso no la detuvo, me dio la vuelta hacia arriba, me miró, estaba sudando tanto que parecía haber salido de la ducha, una risa malvada y pícara salió de su rostro, se me acercó y me dijo al oído “Ahora me toca a mí”, metió su verga dentro una vez más, pero esta vez la pude ver, pude ver a ese monstruo entrar hasta el fondo de mis intestinos, pero me sentí bien, se me acercó mirándome a los ojos, mientras lo metía lentamente.
Se mordió los labios, y rápidamente sacó su verga de mi culo desvirgado, oí cuando sacó ése hermoso y venudo pene de mí, se retiró el condón y puso su verga en mi boca, jamás había sentido eso, me la metió tan dentro, que la sentí ...
... entrar por mi garganta, se ponía cada vez más y más duro, un sabor entre salado, dulce y amargo invadió mi boca, cogí esas dos hermosas nalgas y empujé mucho más adentro, hasta que se vino, se quedó en mi boca, mientras la miré a los ojos y vi lo roja que se ponía mientras parecía salirle el alma del cuerpo y retorcía su mirada haciendo blancos sus ojos, escupí su semen, el semen de una chica, a pesar de tener pene, yo siempre la veo como si fuera una mujer.
Quedó tendida en la cama, tan cansada que no tenía fuerzas para siquiera hablar, me abrazó me dio un beso, con mucha dificultad me preguntó si ahora yo quería probar ese culazo, pero me acababa de venir, y ya no tenía ganas.
- “No hay problema, vienes otro día y me la metes, por ahora ve a casa”.
Me bañé lo más rápido que pude en su baño, cuando salí vi que se acostó a dormir, “cierras al salir, por favor”, me dijo, así que así lo hice, mientras caminaba pensé en lo que había pasado, me abrieron el culo, y sobre todo con una verga mucho más grande que la mía, tal y como ella misma lo dijo, desde ese entonces veía el mundo de otra manera, había pasado de homofóbico a ser totalmente versátil.
Al llegar a casa, le gustó mi nuevo corte a mi mujer, quien estaba esperándome con su top con el que se le veían unas tetotas grandes y jugosas, un hilo rojo, y a penas la vi, se me había parado la verga, el mejor día de mi vida, desde ese día casi siempre voy a visitarla, bien para ser su hombre y sentir ése culazo, esas dos ...