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Túnel dimensional, Mesopotamia
Fecha: 24/01/2025, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
..... "Cualquier tecnología lo suficientemente avanzada es indistinguible de la magia" Tercera ley de Clarke. El túnel al multiverso es una tecnología desconocida y aún incontrolada. Los científicos no se ponen de acuerdo en sus bases teóricas. Pero sus efectos son bien conocidos en la institución que lo estudia. Gracias a los informes de los conejillos de Indias, ups, perdón, las personas que lo cruzan con destinos inesperados. Otras épocas, lugares e incluso mundos de fantasía, de novela o de cine. Esta colección de extractos de esos informes hace hincapié en las vivencias más eróticas de la protagonista narradas por ella misma. ¡Oh! Mierda es lo único que pude pensar cuando salí al otro lado del túnel. Esta vez si que alguien o algo la había cagado y mucho. Estaba completamente desnuda encima de un altar rodeada por una multitud vestida a medias con algún tipo de burdas túnicas y taparrabos. En el medio de una gran plaza en una aldea o ciudad hecha de adobe y techos de cañizo. Desde donde estaba no podía distinguir el tamaño real de la población. Pero por el número de la multitud no podía ser pequeña. Las caras de espanto y sorpresa de las gentes de alrededor al verme aparecer entre los fuegos artificiales del túnel ocultaron mi sorpresa el tiempo suficiente para que me hiciera una idea de la situación. A estas alturas ya era bastante rápida identificando el lío en el que estaba metída cada vez. La ciudad, por llamar de alguna forma a aquel ...
... conjunto de chozas, era muy primitiva a juzgar por mis escasos conocimientos de arqueología. Me daba pocas indicaciones sobre el lugar y el tiempo. Podía encontrarme en algún lugar de oriente medio o Anatolia, el creciente fértil. O puede que en época babilónica o Mesopotamia. Por lo que sabia en ese primer momento incluso Mesoamérica era una opción, solo si por allí había maiz claro. Las estatuas de los dioses que flanqueaban el ara, una forma femenina y otra masculina estilizadas con los atributos sexuales muy potenciados tampoco es que me dieran muchas pistas. No había toros alados ni otras deidades que yo pudiera reconocer. Mi primera intención fue salir corriendo en pelota picada y esconderme en algún rincón, pero con tal afluencia de fieles eso hubiera sido imposible. Me decidí por la segunda opción, ocupar el papelón de diosa que el túnel en su infinita sabiduría me había atribuido. El sacerdote situado a dos pasos de mi y postrado por el terror de ver a su divinidad encarnada de repente, tenía unas anchas espaldas, una lacia melena negra y un un culo duro y bien formado que su escaso taparrabos me permitía ver. El tipo no estaba mal del todo, para ser un ejemplar del neolítico. Nunca llegué a quedarme con su nombre. Entre la multitud algunas bellas muchachas apenas vestidas y algunos jóvenes que lucían agradables y musculosos cuerpos prometían algunos placeres mayores de los que la primera impresión daba. La verdad es que parecían gentes bien alimentadas y ...