1. Mi amigo, apostó y hasta el culo perdió…….


    Fecha: 02/02/2025, Categorías: Dominación / BDSM, Gays Autor: Martehijodejupiter, Fuente: SexoSinTabues30

    ... seguro van a querer darme por el culo, para que no sea pendejo, y no esté apostando lo que no debo”.
    
    Así que, en lugar de retirarse, y decirnos que no iba la apuesta, supuestamente procuro darle a la lata de refresco.
    
    No sé si fue la borrachera que mi amigo tenía, pero de todos los tiros que realizo, fue el peor de todos.
    
    Además, para completar, el indio, sonriéndose conmigo le dijo. “Vamos a darle otra oportunidad.”
    
    Oportunidad que debió aceptar para retirarse, pero no lo hizo, en su lugar comenzó tontamente decir que, si le iba a dar, y desde luego que falló.
    
    En esos momentos me le acerqué por dé tras, me le quedé viendo sus paradas nalgas, y le dije. “Bien, perdiste verdad.”
    
    A lo que él me respondió que sí, “Y yo te dije que vas a hacer lo que te digamos, ¿verdad?” A lo que él respondió que sí.
    
    A lo que yo le respondí. “Bueno queremos que nos des el culo.” Mi amigo se quedó como paralizado, y aunque era algo que él mismo nos había dicho que podía sucederle, al escucharme a mi decirle esas palabras, mi amigo puso cara de que no lo podía creer.
    
    Fue cuando el indio, al mismo tiempo que yo, los dos comenzamos a bajarnos los pantalones, dejando al aire nuestras respectivas vergas.
    
    Se notaba que no sabía ni que hacer, por una parte, no dudo, que tuviera ganas de salir corriendo, pero la verdad es que él, ni idea tenía hacia donde correr, pero, por otra parte, el mismo fue él que dijo, que haría lo que nosotros quisiéramos.
    
    Fue cuando colocamos ...
    ... nuestras manos, en sus hombros, y sin mucho esfuerzo, en medio de la selva hicimos primero que se arrodillase, y luego que pegase su pecho a la tierra.
    
    Casi de inmediato le dije al indio. “Deja que yo le dé por el culo primero, pero mientras tanto dale un trago.”
    
    Seguidamente le dije a mi amigo. “Separa las piernas un poco, para que no te duela”. Cosa que él en medio de su borrachera hizo sin oponerse, ni resistirse a mi pedido.
    
    Él como que aún estaba en shock, diciéndome cómo era posible que yo, su propio amigo, le fuera hacer eso, él no lo podía, o no lo quería creer.
    
    Hasta que comencé a meter mis ensalivados dedos acariciando el centro de sus nalgas, y suavemente introduciéndoselos por el ojete de su culo.
    
    Luego le dije. “Relájate, para que no te duela”, y así continúe metiendo, y sacando mis dedos, todos llenos de saliva, mientras que el indio primero le dio un trago, y luego otro.
    
    A los pocos segundos, sentí como mi verga se fue abriendo paso atravesando su esfínter.
    
    Mi amigo aun, a pesar de sentir que yo le estaba metiendo toda mi verga, no paraba de decir. “No lo puedo creer, que me estés dando por el culo”.
    
    A medida que continué presionado mi cuerpo contra el suyo, seguí sintiendo como toda mi verga atravesaba su culo.
    
    Él estaba a punto de decirnos algo, cuando el indio, le dio otro trago, el que se bebió de inmediato, ya había comenzado a meter, y sacar rítmicamente toda mi verga, dentro de su cuerpo.
    
    Cuando sin que se lo dijésemos, mi amigo ...