1. El hijo de la dueña de la casa se burló de mí, y por eso le reventé el culo.


    Fecha: 14/02/2025, Categorías: Gays Transexuales Autor: Martehijodejupiter, Fuente: SexoSinTabues30

    ... pocos segundos, él comenzó a menear sus caderas.
    
    Al principio lenta y suavemente, como si tuviera miedo de seguir sintiendo aquel fuerte dolor, que le provoqué, cuando le enterré toda mi verga.
    
    Pero al poco rato, comenzó a sentir algo distinto, y casi sin poder controlarse, siguió moviendo sus caderas, con más fuerza, y rapidez, al tiempo que, de su boca, de forma incontrolable, salían profundos gemidos de placer.
    
    En cierto momento, me di cuenta de que restregaba su cuerpo contra el mío, como buscando sentir más, y más dentro de él toda mi erecta verga.
    
    Mientras que yo, no dejaba de acariciar sus muslos, y nalgas, al tiempo que seguía besando y mordisqueando su nuca, y orejas, diciéndole. “Princesita, se ve que te está gustando, que te den por el culo”.
    
    A lo que él, ya sin seguir llorando, me respondió. “Sí papi, pero dame más duro”. Por un buen rato, continué dándole sabrosamente por el culo, mientras que él sin detenerme seguía moviendo sus nalgas.
    
    Su excitación era tal, que el solo roce de su miembro contra la tumbona, en la que estaba recostado bocabajo, hizo que se viniera, mientras que yo continuaba clavando una, y otra vez toda mi verga entre sus paradas nalgas.
    
    Hasta que después de un rato, lo apreté con más fuerza contra mi cuerpo, viniéndome por completo dentro de su culo.
    
    Cuando extraje mi verga, de entre sus nalgas, les juro que para mí sonó, como quien descorcha, una botella de champan.
    
    De inmediato tras parame, agarré la manguera, y me ...
    ... lave mi verga, mientras que el mariconcito embelesado, acostado bocabajo, sobre la tumbona observaba fijamente toda mi verga.
    
    En esos instantes, quizás pensó que ya todo había terminado, pero no fue así, se equivocó, sin decirle nada, lo agarré por su larga cabellera, y sin mucho esfuerzo de mi parte, hice que medio se levantase.
    
    Luego acerqué mi verga frente a su boca, y de inmediato, comprendió que era lo que yo deseaba, sin esperar a que se lo dijera se dedicó a mamar mi relajada verga, hasta que a medida que me la fue chupando, se me fue volviendo a poner bien dura.
    
    Como les dije según él en su vida, jamás había hecho nada de eso, y aunque nunca había tenido sexo antes con nadie, entendió que eso era lo del.
    
    Acabé por completo dentro de su boca, por lo que se tragó gran parte de mi leche, después sin decirle nada me retiré, dejándolo, tirado sobre la tumbona, con sus piernas y culo bien abiertos, chorreando mi leche entre sus nalgas.
    
    Creo que nunca le dijo nada a su mamá, ni a nadie de lo sucedido, pero a la siguiente semana cuando fui a trabajar en el jardín.
    
    Como si nada hubiera pasado, discretamente el chico se volvió a recostar sobre la tumbona, pero solo cubrió sus desnudas nalgas, con una pequeña toalla.
    
    Al rato me le acerqué, retiré la pequeña toalla, y haciendo que se pusiera bocarriba, sobre aquella tumbona, lo tomé por los tobillos, separé sus piernas, y simplemente enterré mi verga dentro de su culo.
    
    Mientras que él moviendo sus caderas ...