Trío con mi esposo y el caleño
Fecha: 01/04/2025,
Categorías:
Infidelidad
Autor: andrea, Fuente: TodoRelatos
... nalgas a mi esposo quien se aferró a mi cintura para metérmelo de un solo golpe y enterrarlo con fuerza en cada metida, cosa que me hacía clavar más profundo la verga del caleño en mi boca, por momentos mi nariz se estrellaba contra la pelvis del caleño.
Invertí mi posición para mamar la verga de mi esposo y permitir al caleño gozar de mis nalgas, éste fue más considerado conmigo, lo enfrentó con su mano y lo fue enterrando con suavidad, pude sentir cómo se iba introduciendo milímetro a milímetro dentro de mi conducto vaginal, el que sabe – sabe, pronto estuvo enterrado hasta el fondo, comenzó el mete y saca con cariño, uno que otro golpe fuerte y vuelta a darlo con suavidad, yo estaba encantada con ese tratamiento, mis piernas temblaban de la emoción, por momentos le clavaba las uñas a mi esposo en sus piernas y él me volvía a traer a este mundo.
El caleño fue invitado a que se sentara en el sillón, me le acomodé encima dándole la espalda, me clavé vaginalmente la verga del caleño y mi esposo se metió de frente a clavarme por el mismo agujero, mis tetas eran apretadas por el caleño, mi nuca era mordisqueada y besada también por el caleño, mis labios vaginales se preparaban y se aperturaban para permitir la estadía de esos dos miembros muy apetecidos por mí, lo que me hacía descargar chorros de líquidos, pronto los movimientos de esos dos invitados me hacían brotar quejidos de mi garganta, tanto por la emoción como por el dolor o incomodidad que por momentos se ...
... presentaba.
Mi esposo por momentos paraba y se acomodaba para besar mi boca, sentía que no estaba cómodo en esa posición, por eso les dije cambiemos de posición, mis machos muy obedientes seguían mis instrucciones,
Me abracé a los dos y nos besábamos alternadamente, sus vergas chorreaban jugos en mis piernas, se sentían muy calientes y tensas por el efecto de la pastilla, yo seguía con mis piernas temblorosas.
Recordé la noche de mis exnovios y me senté en el borde del sillón, invité a mi esposo a que me lo clavara así, me dejé caer y quedé sobre los dos descansa-brazos del sillón, mientras mi esposo taladraba mi raja, el caleño llegó con sus 25 centímetros a mi boca por el otro lado del sillón a donde estaba mi esposo, en esa posición recostada como un puente comencé a disfrutar de mis machos.
El caleño dejó descansar sus bolas sobre mi frente y acostó su vergota sobre mi cara, creo que fue por ofender a mi esposo o demostrar superioridad, esa verga sobresalió de mi quijada, después de pasar por encima de mi nariz, boca y mentón, con mi mano agarré su cabecita y la fui llevando a mi boca para acomodarme y empezar a engullir hasta hacerla desaparecer, pronto estuvo completa dentro de mi boca y garganta, al rato me la saqué y les dije: cambien de puesto,
Mis machos muy obedientes, cambiaron puestos, el caleño se agachó a meter sus dedos en mi raja para terminar chupando mi clítoris y lamiendo mis labios vaginales con mucho cariño y tacto para no hacerme algún tipo de ...