1. Celebramos selectividad


    Fecha: 25/04/2025, Categorías: Gays Autor: Alexandria, Fuente: TodoRelatos

    ... mano y se fue riéndose para dentro. Supongo que sabría qué hacía yo allí y eso me hizo sentir vergüenza.
    
    Aproveché que estaba solo para ir a buscar a Jaime al baño.
    
    J: ¡Hombre pero mira quién ha venido ya! - Me dio un morreo y, joder, salía del baño ya desnudo… menudas vistas ese cuerpo fibrado y moreno y esa polla morcillona recolgando.
    
    A: Hola guapo jajaja Me ha abierto la puerta tu compañero Nacho, me ha dicho que se iba ya. Me miraba como si supiera algo… jajaj
    
    J: A ver, soy un semental, qué crees que piensa cuando ve a un niñino como tú entrar por la puerta justo cuando el piso va a estar vacío…
    
    A: Qué cabrón eres, seguro que le has dicho algo también… Por cierto, he dejado la cena y el desayuno en la cocina.
    
    J: Gracias. Te tengo una sorpresa - dijo riéndose de una forma medio cachonda medio malvada.
    
    A: Ok vaya, yo no te he traído nada, ¿había que traer algo? - dije riéndome. No me esperaba qué sorpresa podía tener, pero tampoco me quería ilusionar con que me hubiera comprado algo.
    
    J: Ven, vamos al cuarto y cierra los ojos.
    
    Entré al dormitorio y cerré los ojos. Escuché cómo Jaime rebuscaba en sus cajones algo y de repente volvía hacia mí y me dejaba una caja en las manos.
    
    J: Abre los ojos.
    
    Cuando abrí los ojos descubrí ante mí una caja negra cuadrada. La sorpresa llegó al abrirla, cuando descubrí un tanga de encaje que, claramente, no era suyo.
    
    A: ¿Qué cojones? ¿Y esto?
    
    J: Póntelo, se lo he cogido a una de mis compañeras del ...
    ... armario. Si vas a ser mi putita tendrás que portarte como tal ¿no?
    
    A: ¿En serio quieres que me ponga esto? Nunca he hecho nada parecido…
    
    J: Mira, desnúdate, aquí en esta casa irás desnudo con ese tanga mientras estés, así podré tener tu culo más que accesible para follármelo cuando me entren ganas. Y hablando de ganas, ya la tengo bastante gorda y creo que podemos dejar las mamadas para después… Ponte el tanga y a cuatro patas zorrita.
    
    A: Sí, vale.
    
    Nunca había hecho nada parecido ni me habían tratado tanto de esa manera, pero aun sin saber del todo si me convencía, me estaba poniendo cachondo como una moto. Me desnudé entero, me puse el tanga blanco y me coloqué a cuatro patas.
    
    J: Buah, qué bien te queda ¿no? Así me van a entrar ganas de follarte cada cinco minutos. Luego tengo otra sorpresa para ti, pero cada cosa a su momento. Ábrete bien el culo que voy te lo voy a merendar.
    
    Se puso tras de mí y empezó a lamerme el ojete con ganas, notaba que su lengua quería follarme las entrañas, apretaba y apretaba cada vez más con su lengua y escupía para lubricarme. Notaba su nariz y su lengua restregándose por todo mi culo y yo estaba que me caída del placer.
    
    J: Bueno, esto ya va estando listo. Date la vuelta, que quiero verte la cara de puta que pones mientras te follo.
    
    Y empezó a metérmela, con mucho dolor al principio, no sé por qué esta vez la notaba incluso más gorda que la vez anterior.
    
    A: Auuh, me duele, ve más despacio, me vas a partir, por favor.
    
    J: ...