El gordo y fuerte señor dueño de un Border Collie 1
Fecha: 06/06/2025,
Categorías:
Incesto
Masturbación
Sexo con Maduras
Autor: ssss, Fuente: SexoSinTabues30
... para la carrera, y de repente, se cruzó en mi camino el señor propietario de Leko acompañado de su mujer, supongo. La mujer caminaba a su lado cogida a su poderoso brazo, el cual mientras caminaba llevaba recogido en el pecho en forma de ele. Esto lo había visto yo en abuelos o personas de avanzada edad, pero aquella mujer no pasaría de los cincuenta y él no mayor de cincuenta y tres, calculo. Su señora era acusadamente más baja que él, que rondaría 1.72 cm. Esto que vi me dió una gran información del tipo de persona en la que me había fijado. Estaba claro que era un señor de los de antes. Con una educación a la antigua. Clásico. Con su pelo raya al lado negro, rebeca de punto azul marina, camisa azul marina lisa desabotonada, pantalones azul marino y zapatos de cordones negros. Un físico portentoso. Gordo pero muy fuerte de brazos y piernas, con una papada prominente y el rostro siempre bien afeitado. Casi no tenía cuello de lo ancho que era. Me miró y yo a él durante un par de segundos, suficientes para que esa noche humedeciera mis sábanas pensando en como sería estar a solas con él. Inventé miles de historias esa noche pero me quedé con esta…(el señor propietario de Leko se llama Jacinto. Tiene 53 años mide 1.72 y pesa 106 kilos. Es taxista, está casado y con dos hijos. Lo conozco de vista porque mi madre siempre le llama para que le lleve a sitios. Trabaja la mayor parte de horas por la tarde-noche. Un día saliendo de comerme un perrito caliente en una hamburguesería, ...
... me lo encuentro aparcado en su taxi, sentado en él con la mirada perdida. Le saludo y compruebo que no espera ningún cliente, sólo está descansando. Mientras charlamos, se acomoda en el asiento echando su culo hacia delante y poniendo sus manos detrás de la nuca, con lo que alcanzo a ver que tiene la polla morcillona. Se la toca y me mira invitándome a dar una vuelta en su taxi. Por el camino me cuenta que ya no tiene nada de sexo con su mujer y que ha ido con putas pero que ya no le satisfacen. Noto un bulto enorme a punto de reventar su bragueta y yo estoy empalmadísimo. Le pregunto que es lo que le gusta ahora y me contesta: “ahora te lo enseñaré”. Aparca el taxi y me dice que baje. Entramos a un edificio y pulsa el tercero, hasta llegar a la puerta 12. Abre y me dice que entre. Está todo desordenado. Botellas de whisky medio vacías en una mesa con algunos vasos y un sillón con televisor enfrente. Sirve whisky y se sienta en el sillón. Se abre de piernas y se saca un pedazo de polla de unos 21 por 5 cm, increíble y se empieza a masturbar. Yo me desnudo y le bajo los pantalones grises con dificultad ya que un muslo suyo son como tres míos ya que soy delgadito e imberbe. Le desabrocho la camisa de rayas verticales azules y él me besa con lengua mientras me pone la punta del capullo en la entrada de mi ojete sin nada de vello. Yo le acarició los fuertes brazos cuando me la clava. Noto como si me hubiera explotado el culo pero su olor a hombre maduro macho me excita sobremanera ...